No revisar periódicamente la graduación de los lentes suele ser un problema común de salud visual en la población, lo cual puede desencadenar una serie de circunstancias negativas, indicó una especialista.

Es muy importante que cuando una persona utilice lentes —de cualquier tipo— revise la graduación con un médico por lo menos una vez al año, de lo contrario podría sacrificar su calidad visual, destacó Luz María Arce Romero, jefa del servicio de Oculoplástica adscrita al Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Jalisco.

De no llevar a cabo esta revisión periódica, el paciente con anteojos puede presentar síntomas como “ojo rojo, sensación de ‘basuritas’ y dolor de cabeza, así como dificultad para enfocar objetos de cerca o de lejos y tener un menor rendimiento, en el caso de los estudiantes, o provocar accidentes viales en los mayores”, expuso la experta.

Este es un punto en el que deben prestar atención principalmente los padres de niños que usan lentes, señaló Arce Romero, pues detalló que muchas veces los padres de familia les compran los lentes que necesitan pero no hacen cambios en las micas durante muchos años.

Esto puede provocar que las patologías oculares de los niños evolucionen en lugar de disminuir, advirtió. “Muchas veces la patología deja de evolucionar cuando el niño llega a la mayoría de edad, pero aún así es preciso cuidar la salud visual”, agregó.

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De acuerdo con la especialista del IMSS, tener una visión óptima es fundamental para los niños de preescolar y primaria, ya que de lo contrario se afecta su percepción visual y tienen dificultades para escribir.

Si el menor tiene antecedentes familiares de miopía, astigmatismo o hipermetropía, el cambio de graduación debe actualizarse no cada año, sino cada seis meses”, explicó Arce Romero.

Finalmente, subrayó que este no es un problema propio de la niñez, ya que adolescentes y adultos “pueden continuar o presentar por primera vez síntomas de defectos visuales moderados, de modo que deben acercarse mucho para ver algo pero no ven de lejos”.

“Esto es peligroso cuando salen a la calle, porque pueden caer o recibir un golpe y también cuando manejan, porque no ven letreros, personas o animales. Las revisiones oculares deben priorizarse en todo momento a lo largo de la vida”, enfatizó.

 

Vía: Notimex