La miocardiopatía hipertrófica (MCH) es una enfermedad en la cual el músculo cardíaco (miocardio) se vuelve anormalmente grueso (desarrolla hipertrofia). De esta forma, el músculo cardíaco engrosado puede dificultar que el corazón bombee sangre, así lo indica la Clínica Mayo, en Estados Unidos.

Síntomas

La miocardiopatía hipertrófica normalmente no es diagnosticada, ya que muchas personas con la enfermedad desarrollan pocos síntomas (si es que muestran alguno), y pueden llevar una vida normal sin problemas significativos. No obstante, en un pequeño número de personas con la afección, el músculo cardíaco engrosado puede causar:

  • Dificultad para respirar
  • Dolor en el pecho
  • Problemas en el sistema eléctrico del corazón, lo que resulta en ritmos cardíacos anormales (arritmias) potencialmente mortales.

Otros síntomas de MCH incluyen mareos, desmayos, sensación de aturdimiento y fatiga.

Causas

La miocardiopatía hipertrófica se transmite con mayor frecuencia a través de las familias (es hereditaria). Se cree que es resultado de defectos en los genes que controlan el crecimiento del músculo cardíaco.

También existe la posibilidad de que las personas más jóvenes tengan una forma más grave de MCH. Sin embargo, la condición se presenta en personas de todas las edades.

Conoce más: 5 alimentos que ayudan a mejorar la circulación sanguínea

Exámenes y pruebas

Tu proveedor de atención médica realizará un examen físico y escuchará el corazón y los pulmones con un estetoscopio. Los signos pueden incluir:

  • Ruidos cardíacos anormales o soplo cardíaco. Tales sonidos pueden cambiar con diferentes posiciones del cuerpo.
  • Presión sanguínea elevada.

También se verificará el pulso en tus brazos y cuello. El proveedor puede sentir un latido anormal en el pecho.

Las pruebas utilizadas para diagnosticar el grosor del músculo cardíaco, los problemas con el flujo sanguíneo o las válvulas cardíacas con fugas (insuficiencia mitral) pueden incluir: electrocardiograma, ecocardiografía, radiografía de pecho, resonancia magnética cardíaca, exámenes de sangre, entre otras.

Tratamiento

Siempre sigue los consejos de tu proveedor de atención médica sobre practicar ejercicio si padeces MCH. Podría pedirte que evites el ejercicio extenuante. Además, consulta a tu médico para que te programe chequeos regulares.

Si tienes síntomas, posiblemente necesites medicamentos como betabloqueadores y bloqueadores de los canales de calcio, a fin de ayudar al corazón a contraerse y relajarse correctamente. Dichos medicamentos pueden aliviar el dolor de pecho o la falta de aliento al hacer ejercicio.

 

Vía: Mayo Clinic / Medline Plus