La acantosis nigricans o acantosis pigmentaria es una afección en la que la piel se engruesa y oscurece en algunas partes del cuerpo, así lo indica el portal Medline Plus, parte de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Aunque su nombre parezca bastante difícil de recordar, si llegas a padecerla, seguramente te preocupará tanto su aspecto que la tendrás en mente. Esto porque tu piel se tornará más gruesa y oscura, particularmente alrededor de las articulaciones y en las áreas con pliegues y arrugas, dígase los nudillos, las axilas, los codos, las rodillas y el cuello.
Hay personas en las que el padecimiento también afecta a las palmas de las manos, la cara interna de los muslos, las ingles, los labios u otras partes del cuerpo. La piel suele mantenerse suave y, por tal motivo, es común que se use el término “aterciopelado” para describir el trastorno cutáneo.
¿Quiénes son más propensos a padecerla?
Las personas con sobrepeso u obesidad son más propensas a desarrollarla, pero tiende a mejorar o desaparecer una vez que adelgazan. Asimismo, hay personas en las que aparece por cuestión hereditaria, y se han dado casos de personas con linfoma o cánceres en las vías genitourinarias o gastrointestinales que han presentado cuadros graves del padecimiento.
Los tratamientos hormonales también podrían ser responsables de causar acantosis.
En cuanto a los síntomas, normalmente aparecen de forma lenta y no generan ningún signo distinto a los cambios en la piel.
Conoce más: Descubre las enfermedades de la piel causadas por la obesidad
En ocasiones aparece en personas con diabetes tipo 2 o cuyo riesgo de desarrollar esta diabetes es elevado. Si la persona se encuentra en dicha situación, la acantosis nigricans no es peligrosa en sí misma. Sin embargo, podría ser señal de una diabetes no detectada o de otros problemas de salud que los médicos deberían evaluar. El mero hecho de diagnosticar y tratar el problema de salud subyacente mejoraría o haría desaparecer la acantosis pigmentaria.
De acuerdo con la Asociación Americana para la Diabetes, alrededor del 75 % de los niños con diabetes tipo 2 desarrolla acantosis nigricans. Controlar la diabetes y el sobrepeso en estos niños reduce sustancialmente la visibilidad de la acantosis.
¿Qué hacer si desarrollas la afección?
Si presentas esta afección cutánea no debes alarmarte, pues no es perjudicial ni contagiosa, pero debes acudir al médico para descartar que haya sido provocada por alguna otra enfermedad que sí requiera de atención médica. De ser diagnosticado(a) con acantosis, tu especialista seguramente querrá practicarte un análisis de sangre u otras pruebas que determinen su causa.
Solo si tu médico lo cree necesario te recomendará iniciar un tratamiento para mejorar tu piel. Como la acantosis no está relacionada con ninguna condición médica de gravedad, usualmente no será necesario que recibas tratamiento, pues suele desaparecer por sí sola.
Mantener un peso saludable, haciendo ejercicio con regularidad y comiendo sano, ayuda a prevenir o tratar la acantosis pigmentaria.
Vía: Medline Plus / Kids Health
