La pérdida de movilidad posterior a un infarto cerebral puede provocar dificultad para caminar y tener que aprender a hacerlo de nuevo.

En concreto, los efectos físicos de un infarto cerebral [o evento vascular cerebral (EVC)] que afectan el equilibrio/coordinación/movilidad/marcha incluyen los siguientes:

  • Debilidad/parálisis muscular
  • Pies caídos
  • Fatiga/cansancio
  • Dolor debido al daño a los tejidos/nervios
  • Espasticidad
  • Contracturas
  • Cambios en la sensación

Después de un EVC, la mayoría de los pacientes pueden volver a caminar dentro de los primeros seis meses o, en los casos en donde la movilidad se ha visto gravemente comprometida, dentro de los primeros dos años. Según los expertos, la probabilidad de recuperar la función tras un EVC aumenta con la intensidad de la rehabilitación.

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La mayoría de las mejoras tienen lugar dentro de los primeros seis meses posteriores al infarto cerebral inicial. Para los sobrevivientes de eventos cerebrovasculares que sufren de afasia (25% a 40%), puede tomarles hasta dos años recuperar por completo la capacidad de hablar.

En concreto, la línea de tiempo de recuperación después de un EVC es la siguiente:

  • 5-6 semanas: Terapia física intensa/rehabilitación
  • 3 meses: la mayoría de la recuperación termina en una meseta
  • 6 meses: mejora la marcha
  • 2 años: el 74% de los pacientes deberían poder caminar

La rehabilitación de una persona debe comenzar tan pronto como se encuentre estable después del EVC. Esto podría ser desde un par de días hasta unas pocas semanas o más.

 

Fuente: Health Day