Para la mayoría de las personas sudar es algo cotidiano, natural y que no tiene nada de extraordinario o preocupante. Pero, para un reducido sector de la población, puede significar un verdadero problema médico, se trata de aquellas personas que padecen hiperhidrosis.

Sudar es una reacción involuntaria del cuerpo que ayuda a controlar la temperatura corporal. Normalmente, el cuerpo suda para enfriarse y eliminar productos de desecho, sobre todo cuando se está haciendo un esfuerzo físico. No obstante, cuando se suda en exceso a pesar de estar calmados y en un ambiente fresco, se trata de hiperhidrosis.

Las personas con este padecimiento sudan sin motivo obvio y su sistema de control de temperatura hiperactivo puede hacer que eviten los ámbitos sociales del todo, expone el doctor Robert Korst, director médico del centro de hiperhidrosis del Valley Health System, en Ridgewood, Nueva Jersey, Estados Unidos.

Según Robert, esta afección la padecen cerca de 7 millones de personas tan sólo en Estados Unidos. Para los pacientes con hiperhidrosis, detalló, pensar en darle la mano a alguien es motivo para humedecer sus palmas, sus axilas o incluso sus pies. En algunos casos, compartió, la hiperhidrosis sucede en todo el cuerpo.

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De acuerdo con el especialista, este padecimiento comienza a manifestarse durante la niñez la mayoría de las veces, y la genética podría tener un rol en su desarrollo. Robert agregó que existen tres tipos principales de hiperhidrosis, cada uno con su propio tratamiento:

-Primaria focal. La sudoración excesiva puede ocurrir en partes específicas del cuerpo, como los pies, las manos, axilas o la cara. En los casos graves, el sudor se desprende en gotas de la piel, lo que puede generar irritación e infecciones en la piel. Puede ser tratada con medicamentos, o incluso cirugía.

-Idiopática generalizada. En este caso se suda en exceso en una gran área del cuerpo. Puede ser tratada con medicamentos o cirugía.

-Iidiopática secundaria. Este caso de hiperhidrosis es provocado por una afección médica, como la menopausia, un trastorno de la tiroides o diabetes. También puede ser provocada por un medicamento, el ejercicio o el calor. Un dermatólogo puede ayudar a determinar la causa y recomendar un tratamiento.

Si consideras que sudas en exceso pese a estar en condiciones o ambientes tranquilos, háblalo con tu médico.

 

Vía: Health Library