La cúrcuma podría ayudar a proteger las células mucosas del esófago del daño que causan los ácidos estomacales producto del reflujo ácido.

Los autores de una revisión del 2019, publicada en la revista International Journal of Molecular Sciences, sugieren que este efecto protector se debe a las propiedades antiinflamatorias del compuesto curcumina presente en la cúrcuma. Sin embargo, los investigadores deben realizar más estudios que comparen la eficacia de la curcumina con la de los tratamientos clínicos.

Cuando una persona sufre de reflujo ácido, el contenido de su estómago, que incluye líquido digestivo, regresa por el esófago. El líquido contiene ácido clorhídrico, que irrita e inflama el revestimiento del esófago. A largo plazo, el reflujo ácido puede provocar complicaciones, como esófago de Barrett y cáncer de esófago.

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Cómo usar la cúrcuma para tratar el reflujo ácido

Antes de usar cúrcuma como tratamiento para el reflujo ácido, una persona debe discutir sus síntomas con un médico. Las personas también deben tener cuidado de no consumir demasiada cúrcuma durante el embarazo o durante la lactancia.

Una persona puede tomar la cúrcuma de varias maneras. Muchas tiendas de comestibles la venden en forma de polvo, por lo que puede agregarse a las comidas o combinarse con agua hervida para hacer té. Asimismo, las personas pueden obtener el polvo triturando los tallos o rizomas secos de la cúrcuma.

Para aquellos que no les gusta el sabor de la cúrcuma en polvo o no pueden encontrarla en las tiendas, pueden tomar suplementos de cúrcuma a base de hierbas.

La combinación de cúrcuma con pimienta negra puede ayudar al cuerpo a absorber más curcumina, lo que, a su vez, podría amplificar sus beneficios para la salud. La pimienta negra contiene piperina, un compuesto que ayuda a estabilizar la curcumina para que el cuerpo pueda absorberla antes de que se descomponga.

Si quieres saber más sobre cómo la cúrcuma puede ayudarte a tratar tu reflujo ácido, consulta a tu médico.

 

Vía: Medical News Today