Es posible que debas practicar ejercicios para fortalecer la lengua si tiene problemas para tragar, condición que en el ámbito médico se conoce como disfagia. La disfagia puede provocar aspiración, que es cuando los alimentos u otros materiales ingresan accidentalmente a las vías respiratorias o los pulmones, situación que puede tornarse grave ya que puede provocar neumonía y otros problemas. De ahí que la disfagia requiera un diagnóstico y tratamiento oportunos, así lo advierte la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos).

Por lo anterior, los ejercicios para fortalecer la lengua pueden ayudar a mejorar tu deglución (paso de los alimentos u otras sustancias desde la boca hacia el estómago). Con la práctica, estos ejercicios pueden ayudarte a aumentar la fuerza y ​​la movilidad de tu lengua, lo que a su vez puede mejorar tu capacidad para tragar, especialmente cuando se usan con otros tipos de ejercicios para tal fin.

Antes de tragar, mastica la comida a un tamaño, forma y consistencia que se pueda tragar. Cuando tragas, este material pasa a través de la boca y llega a una parte de la garganta llamada faringe. Desde ahí, la comida masticada pasa a través de un tubo largo (esófago) antes de ingresar al estómago y al resto de tu tracto digestivo.

Este movimiento requiere una serie de acciones coordinadas de tus músculos a lo largo de dicho camino. Si algo no funciona correctamente, puede provocarte problemas para tragar. La debilidad muscular en estas áreas puede dificultar la deglución adecuada. Los ejercicios para tragar pueden aumentar la fuerza, la movilidad y el control de estos músculos. Con el tiempo, esto puede ayudarte a tragar normalmente nuevamente.

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Un patólogo del habla y el lenguaje (PHL) puede recetar ejercicios específicos para tragar, a fin de mejorar tu deglución. Los ejercicios específicos dependerán de tu problema para tragar.

Por ejemplo, supongamos que tienes un problema con la primera fase de la deglución, antes de que la comida salga de tu boca. Si es así, puedes beneficiarte trabajando los músculos de esta región, como las mejillas, la lengua y los labios. En este caso, los ejercicios con la lengua pueden resultar útiles. Específicamente, los ejercicios de fortalecimiento de la lengua pueden ayudarte a manipular la comida dentro de la boca y a mover el material hacia la faringe.

Tu PHL puede recomendar diferentes ejercicios para tragar si tu problema se encuentra en etapas posteriores de la deglución.

Puedes realizar estos ejercicios en tu habitación del hospital o en casa. Generalmente, puedes practicarlos por tu cuenta, pero también puedes trabajar con un profesional de la salud para llevarlos a cabo.

Si tienes dudas sobre cómo realizar estos ejercicios, consulta a tu médico.

 

Vía: Johns Hopkins Medicine