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Se ha comprado que el desayuno es la comida más importante del día. Esto no significa que los otros alimentos no sean esenciales, sino que, tras ocho horas sin ingerir nutrientes durante el período de sueño, el cuerpo requiere energía en forma de calorías para funcionar correctamente.

Contrariamente, desayunar poco o nada aumenta el riesgo de diversas enfermedades, al provocar una cadena de hábitos alimenticios dañinos. Entre las afecciones más comunes destacan las lesiones ateroscleróticas y el riesgo cardiovascular, principalmente si existen otros factores de riesgo, como colesterol elevado, tabaquismo o sedentarismo.

De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of American College of Cardiology (JACC), el desayuno es un hábito fundamental para mantener una buena salud cardio­vascular.

“Los nutricionistas siempre han dado mucha relevancia al desayuno y ahora el estudio lo ha demostrado con imágenes tridimensionales de las arterias. Han constatado que la incidencia de la enfermedad aterosclerótica es muy superior entre quienes no desayunan o toman un desayuno muy ligero”, señaló Valentí Fuster, investigador principal del estudio y director del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC), en España.

La investigación arrojó otros resultados interesantes que pueden servir para mejorar los hábitos de acuerdo con la edad. De los participantes, sólo tres de cada diez adultos, y 35% de los niños, tomaba un desayuno saludable. Estas cifras sugieren que el estilo de vida de los padres podría influir en los hábitos alimenticios de sus hijos.

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Consejos

1. Dedica 20 minutos al desayuno.
2. Consume carbohidratos saludables y proteínas.
3. Desayuna en familia siempre que sea posible.

 

Vía: El Universal/ Family Doctor