No es necesario que te digamos que la depresión es mala, es más que obvio que padecerla no traerá cosas buenas para tu salud. Hasta ahora se sabía que sufrir depresión aumentaba las posibilidades de desarrollar una enfermedad cardiaca, pero un reciente estudio encontró que tratarla a tiempo te podría salvar.
Según los investigadores del Instituto Cardiaco del Centro Médico Intermontañas en Salt Lake City, Utah, tener un tratamiento efectivo contra la depresión parece reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiaca.
“Nuestro estudio muestra que un tratamiento rápido y efectivo de este padecimiento parece mejorar el riesgo de una mala salud del corazón”, afirmaron los investigadores en un comunicado de prensa.
Tomando como base investigaciones anteriores, el grupo de trabajo identificó “que la depresión aumenta los riesgos cardiovasculares a largo plazo, pero saber que aliviar sus síntomas también reduce el riesgo de enfermedad cardiaca de una persona a corto plazo puede ayudar a los proveedores y a los pacientes a comprometerse más de lleno con el tratamiento de sus síntomas”, describieron.
Las conclusión a la que llegaron, fue que “si la depresión no se trata, el riesgo de complicaciones cardiovasculares aumenta de forma significativa”, expusieron en el marco de la reunión anual del Colegio Americano de Cardiología, en Chicago, llevado a cabo el pasado fin de semana.
Para llegar a estas conclusiones, se basaron en estudios a más de 7 mil pacientes, encontrando que el tratamiento efectivo de la depresión podía reducir los riesgos cardiacos de un paciente al mismo nivel que el de las personas que nunca habían sufrido este padecimiento. Reduciendo de esta forma sus probabilidades de accidente cerebrovascular, ataque cardiaco, insuficiencia cardiaca e incluso de fallecimiento.
De acuerdo con los investigadores, el riesgo de sufrir un problema importante del corazón fue de un 4.6% entre las personas que recibieron un tratamiento exitoso contra la depresión; un 4.8% entre las que no tenían dicho padecimiento; un 6% entre quienes sí lo tenían y no respondieron al tratamiento; y de un 6.4% entre aquellas que lo desarrollaron durante el estudio.
A reserva de más investigación para determinar qué tipos de tratamientos para la depresión son los más efectivos para reducir los riesgos cardiacos, los investigadores recomiendan a la población acudir a un especialista ante una posible depresión, ya sea en uno mismo o en una persona cercana a nosotros.
Vía: Health Library