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dejar-de-fumar-iUn estudio realizado por la Universidad de Oxford y Birmingham descubrió que contrario a lo que se pensaba, dejar el cigarro mejora la salud mental de las personas.

Los investigadores dicen que el tamaño del efecto positivo en la mente después de que los pacientes dejaron de fumar, es igual a la observada en el tratamiento antidepresivo de los trastornos del estado de ánimo y de ansiedad, conclusión que dará esperanzas a muchos fumadores que quieren dejar el cigarro pero no logran hacerlo al pensar que consumirlo ayuda a reducir el estrés o los nervios.

El profesor Paul Aveyard, del Departamento Nuffield de Ciencias de Salud de Atención Primaria en la Universidad de Oxford, aseguró que varios de sus pacientes a menudo le dicen que no pueden dejar de fumar por que están muy estresados, sin embargo, “ahora sabemos que es todo lo contrario, los médicos podrán tranquilizar a los pacientes y decirles que hay una buena probabilidad de que dejar de fumar les generará menos estrés”.

“De hecho, para las personas con problemas de salud mental crónicos, dejar de fumar puede ser un tratamiento efectivo”, destacó Aveyard, uno de los realizadores de este estudio.

La investigación revisó los resultados de 26 estudios que analizan la salud mental antes de dejar de fumar y por lo menos seis semanas después de ya no hacerlo (en adultos sanos y en pacientes con enfermedades físicas y psiquiátricas a largo plazo), donde comenzaron a notarse mejorías evidentes en su salud mental en comparación con seguir fumando, incluidas los niveles de depresión, la ansiedad, el estrés, la calidad de vida psicológica y la positividad. El efecto fue similar en todos los grupos , incluyendo aquellos con trastornos de salud mental.

«Es sumamente alentador poder demostrar que dejar de fumar conduce a una mejora de la salud mental», dijo Gemma Taylor, una de los investigadoras de la Universidad de Birmingham.

«Las tasas de tabaquismo en la población general se han reducido sustancialmente en los últimos 40 años. Sin embargo, las tasas de consumo de tabaco en las personas con problemas de salud mental apenas han cambiado. Parte de esta disparidad se debe al mito de que dejar de fumar va a empeorar la salud mental. Creo que esta investigación echa por tierra este mito y espero que estos resultados motivan a las personas con y sin problemas de salud mental para dejar de fumar«, concluyó.