Aunque en apariencia cortar el pasto no suene como una actividad peligrosa, la realidad indica que los niños corren un alto riesgo haciéndolo si los padres no son atentos. Esto se debe principalmente al uso de máquinas cortadoras, mismas que no deben ser operadas por menores.
En Estados Unidos, datos oficiales indican que anualmente cerca de 13 mil niños reciben atención por lesiones con cortadoras de césped en los departamentos de emergencias, pero no son los únicos. Tan solo en 2015, más de 68 mil adultos acabaron en salas de emergencias por el uso de estas máquinas.
“Tenemos que recordar a la gente que se trata de máquinas peligrosas, y las consecuencias son devastadoras”, advirtió Mariano Garay, estudiante de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Pensilvania, en Estados Unidos.
“La cuchilla está tan afilada y va tan rápido que las partes del cuerpo no puedan contrarrestar eso”, apuntó por su parte Amy Morgan, jefa del programa de prevención de traumatismos y lesiones pediátricas del Hospital Pediátrico de la citada universidad.
Según datos de un estudio, más de la mitad de los menores de 18 años de edad que fueron hospitalizados por lesiones causadas por cortadoras de césped sufrieron una amputación, sobre todo de las extremidades inferiores.
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Para evitar esta clase de lamentables accidentes, la Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés), recomienda que los niños menores de 6 años de edad se mantengan dentro de casa cuando alguien esté cortando el césped.
“La cortadora emite un ruido fuerte y la persona que la usa no siempre ve o escucha a un niño pequeño que pueda ir corriendo y ponerse delante o esconderse detrás”, destacó Amy Morgan. “Los niños dan por sentado que los adultos los están cuidando, pero los adultos que están cortando el césped están concentrados en esa tarea. Es un escenario preparado para las lesiones”, alertó.
Otra forma de evitar lesiones es caminar por el patio antes de cortar el césped y asegurarse de que no haya juguetes u otros escombros alrededor, pues los niños pequeños también pueden lesionarse con los palos, las piedras y otros objetos que salgan volando por la acción de la cortadora.
La AAP recomienda que estas máquinas no sean utilizadas por menores de 12 años, y en mayores de esta edad, los padres deben supervisarlos. “Es importante que los adultos enseñen a sus hijos cómo usarla con seguridad y que les supervisen hasta que sientan que la pueden usar de forma responsable”, concluye la dependencia.
Vía: Medline Plus
