La sandía contiene un aminoácido llamado citrulina.

El cuerpo convierte la citrulina en arginina, y esta ayuda al cuerpo a producir óxido nítrico, un gas que relaja los vasos sanguíneos y estimula la flexibilidad de las arterias. Tales efectos promueven el flujo de sangre, lo que a su vez puede reducir la presión arterial elevada.

En un estudio, un grupo de investigadores evaluó a adultos con obesidad y prehipertensión leve, quienes tomaron extracto de sandía que contenía 6 gramos de L-citrulina/L-arginina.

Después de 6 semanas, los participantes mostraron una reducción de la presión arterial en los tobillos y las arterias braquiales. La arteria braquial es la arteria principal en la parte superior del brazo.

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Asimismo, en un pequeño estudio realizado en 2019, 27 personas consumieron jugo de sandía u otra bebida antes del ejercicio. Las mujeres que bebieron jugo de sandía no experimentaron un aumento de la presión arterial después de la actividad física, aunque los hombres sí.

Las personas pueden consumir sandía de las siguientes maneras:

  • Como jugo o agua
  • En ensaladas, incluidos los cócteles de frutas
  • En batidos o licuados
  • En una sopa de sandía fría
  • Una porción de sandía es 1 taza de fruta picada o 1 rebanada de alrededor de 5 centímetros (cm).

 

Fuente: Medical News Today