Las maniobras vagales son intervenciones físicas que se utilizan para intentar frenar un episodio de taquicardia supraventricular (TSV), un latido anormalmente rápido o errático que afecta las cavidades superiores del corazón. Estas sencillas maniobras estimulan el nervio vago, lo que a veces resulta en una conducción más lenta de los impulsos eléctricos a través del nodo auriculoventricular (AV) del corazón, desacelerando así la frecuencia cardíaca, así lo explica el Sistema de Salud de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos.

Con base en lo anterior, asegúrate de hablar con tu médico antes de probarlas.

Tu proveedor de atención médica también puede mostrarte cómo realizar dichos procedimientos de manera segura, y es posible que te recomiende realizarlos mientras estás acostado(a) boca arriba.

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Las maniobras vagales que puedes intentar para disminuir tu frecuencia cardíaca rápida incluyen:

  • Tironeo hacia abajo. Tirar o empujar hacia abajo significa que intentes exhalar con los músculos del estómago, pero no debes dejar que el aire salga por la nariz o la boca.
  • Ponerse una toalla húmeda helada en la cara.
  • Toser o tener arcadas (ocurren cuando el cuerpo trata de vomitar sin devolver nada del estómago).

RECUERDA: Además de estas intervenciones, tu médico podría intentar otra maniobra vagal (llamada masaje del seno carotídeo) en la sala de emergencias para ayudar a disminuir la frecuencia cardíaca. Dicha técnica solo debe ser realizada por un médico en caso de que ninguna de las anteriores haya funcionado.

Si tienes más dudas sobre las maniobras vagales, consulta a tu médico.

 

Fuente: University of Michigan Health