La trombosis venosa profunda se produce cuando se forma un coágulo de sangre en una o más venas profundas del cuerpo, generalmente en las piernas.

Puedes desarrollar una trombosis venosa profunda si tienes ciertas enfermedades que afectan la forma en que coagula la sangre. También puede ocurrir si no te mueves durante mucho tiempo, por ejemplo, después de una cirugía o un accidente, cuando viajas grandes distancias o cuando estás en reposo en cama.

Conoce más: ¿Cómo se puede prevenir la trombosis?

Síntomas

  • Hinchazón en la pierna afectada. 
  • Dolor en la pierna. 
  • Enrojecimiento o decoloración en la pierna.
  • Sensación de calor en la pierna afectada.

Cualquier cosa que impida que la sangre circule o se coagule normalmente puede ocasionar un coágulo sanguíneo. Las causas principales de la trombosis venosa profunda son el daño a una vena en una cirugía o un traumatismo e inflamación debido a infecciones o lesiones.

Prevención

  1. Evita el sedentarismo. Si te has sometido a una cirugía o has estado en reposo en cama por otros motivos, intenta ponerte en movimiento lo antes posible. Si permaneces sentado durante un tiempo, intenta no cruzar las piernas, ya que esto puede limitar el flujo sanguíneo.
  2. No fumes. Fumar aumenta el riesgo de contraer trombosis venosa profunda.
  3. Haz ejercicio y controla tu peso. La obesidad es un factor de riesgo para la trombosis venosa profunda. El ejercicio regular reduce el riesgo de coágulos sanguíneos, lo cual es especialmente importante para las personas que deben permanecer mucho tiempo sentadas o que viajan con frecuencia.

Si tienes dudas o presentas síntomas, acude de inmediato con un especialista.

 

Fuente: Mayo Clinic