Adaptarse al horario de verano no es sencillo, no obstante, existen algunas técnicas o trucos que pueden facilitar esta tarea. De acuerdo con el especialista Rubén Santoyo Ayala, evitar tomar siestas prolongadas es el primer paso. En caso de ser necesario, es importante que la siesta sea breve, para que al llegar noche no exista dificultad para conciliar el sueño.
Establecer ciertos hábitos resulta importante pues, aunque no lo creas, el nuevo horario puede propiciar la sensación de «dormir menos». Lamentablemente, esto provoca que la adaptación lleve hasta tres semanas, incluso más cuando se trata de niños menores de cinco años y adultos mayores.
“Algunos andarán con somnolencia en el día, ya que se acostarán y no podrán dormir (…) Es necesario tratar de no modificar los hábitos de sueño a los que ya estamos habituados. Es decir, lo óptimo es acostarse a la misma hora todos los días y levantarse en el horario acostumbrado, para que el organismo no resienta los cambios y se mantenga en estado relajado», añadió.
Conoce más: 5 fabulosos consejos para combatir el insomnio
Otras recomendaciones
- Realiza tu rutina de siempre, sin hacer siestas mayores a 30 minutos.
- Para mejorar tu higiene del sueño, evita cenar pesado o ingerir café después de las 18:00 horas; así como fumar, ingerir alcohol u otras sustancias.
- Realiza ejercicio por la mañana o en la tarde, nunca cerca de la hora de dormir.
- Intenta no tener relojes luminosos en la habitación. Tampoco celulares, tabletas, computadoras o televisores.
- Procura que tu habitación sea un espacio tranquilo, sin ruido y con una temperatura agradable.
Vía: Notimex
