Es común escuchar sobre las personas que acumulan cosas. Si bien parece un tema de programa de televisión, podría no estar tan lejano a ti. ¿Alguna vez has pensado si guardas más cosas de las que necesitas?

Cuando la gente no puede tirar cosas, pilas y montañas de objetos pueden crecer hasta el techo. Pero no es necesario llegar a eso para convertirse en un acumulador. Guardar de poco en poco puede provocar caídas o daños a las personas. Además, las casas y patios desordenados pueden atraer plagas.

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A pesar de lo que se dice, la gente no elige ser acumuladora. «Es importante reconocer que las personas con trastorno de acumulación han perdido el control de sus habilidades para tomar decisiones”, de acuerdo con el experto en trastornos de acumulación, David Tolin, del Hartford Hospital’s.

«Siempre nos desconcierta el hecho de que muchas personas con trastorno de acumulación a menudo no parecen terriblemente molestas por su circunstancia. Si no tienen que tomar una decisión, las partes de su cerebro que en gran medida están a cargo de molestarse, son poco activas» señaló.

Cuando se ven obligados a decidir si deben descartar algo, esa parte del cerebro se vuelve hiperactiva, es decir, responde que todo es importante.

Si bien no es fácil determinar las causas, o no existe una prueba para conseguir un diagnóstico irrefutable, es posible detectar ciertas señales, por ejemplo:

  • Incapacidad para deshacerse de objetos sin ninguna utilidad.
  • Anhelo creciente de querer más y más objetos, hasta aquellos que no se necesitan (“para aprovechar la oferta”).
  • La acumulación es más fuerte que la necesidad de convivencia.
  • Miedo a que las personas tomen lo que es tuyo. Es el primer paso para aislarse de la vida en sociedad.
  • Aislamiento y problemas para relacionarse.
  • Negación del problema y rechazo a toda ayuda o propuesta de tratamiento.

Si te sientes identificado, pide ayuda. Recuerda que puedes vivir mejor y feliz.

 

Vía: Hola Doctor