El trabajo es una actividad que pocas veces va acompaña de la palabra ‘feliz’ o ‘felicidad’. Esto se debe a que la mayoría de las personas, lamentablemente, tienen una actividad laboral poco satisfactoria.

Tener un empleo con altos índices de infelicidad provoca un mayor aumento en el estrés y la ansiedad, lo cual se traduce en problemas de salud a mediano y largo plazo, así como un golpe al bienestar y la calidad de vida.

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Asimismo, existen innumerables estudios en donde se relaciona una actividad laboral estresante o poco satisfactoria con un mayor riesgo de tener problemas de depresión.

¿Cómo evitarlo?

De acuerdo con especialistas, el primer paso para ser más feliz en el trabajo es respondiendo una simple pregunta: “¿Me gusta lo que hago?”

La respuesta no necesariamente debe ir asociada con si estamos en la profesión correcta, sino más bien en si las tareas específicas que se realizan día con día en el empleo son satisfactorias y hasta cierto punto nos causa felicidad hacerlas.

Llevar a cabo este pequeño ejercicio es una manera de mejorar cualquier trabajo, mejoras paulatinas que pueden llegar a aumentar en gran medida la satisfacción laboral, señalan expertos.

Beneficios

El principal objetivo es detectar aquellas acciones que realizamos en nuestro trabajo y no nos resultan odiosas, sino más bien satisfactorias.

Sobre los beneficios de hacerlo, un estudio de la Clínica Mayo encontró que los trabajadores que pasan cerca del 20% de su tiempo haciendo un trabajo que “les parece muy significativo tienen un riesgo drásticamente menor de sentir agotamiento”, así como unos niveles menores de estrés.

Consejo

Investigaciones apuntan que no es necesario cambiar todo sobre un trabajo para ver beneficios sustanciales. Unos pequeños cambios pueden ser suficientes.

Para identificar aquellas actividades que causan satisfacción, expertos recomiendan que, durante una semana, se registre en un cuaderno aquellas tareas que nos hacen sentir felicidad y aquellas otras que nos hacen sentir odio.

“Es una manera sencilla de hacer un inventario de tus reacciones emotivas ante la realidad de tu día o semana laboral. Entiende qué es lo que te emociona. Entiende qué es lo que más te atrae. Entiende en qué área eres una persona más energética, creativa, vivaz y entonces ofrécete para realizar eso cada vez más y más”, detalló Marcus Buckingham, investigador estadounidense.

 

Vía: The New York Times