Dado que los eventos de calor extremo se han vuelto cada vez más comunes, es importante que sepas cómo proteger tu corazón.

De acuerdo con la Asociación Americana del Corazón (AHA), las altas temperaturas y la alta humedad pueden provocar deshidratación, lo que hace que tu corazón trabaje más y se ponga en riesgo. Mantenerte hidratado hará que sea más fácil para tu corazón bombear sangre hacia los músculos.

«Si eres un paciente cardíaco, mayor de 50 años o con sobrepeso, es posible que debas tomar precauciones especiales ante el calor», subrayó el doctor Robert Harrington, presidente de la AHA y cardiólogo a cargo del Departamento de Medicina de la Universidad de Stanford, en California (Estados Unidos).

«Ciertos medicamentos para el corazón, como los bloqueadores de los receptores de angiotensina [BRA], los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina [ACE], los bloqueadores beta, los bloqueadores de los canales de calcio y los diuréticos, que agotan el cuerpo de sodio, pueden exagerar la respuesta del cuerpo al calor y provocarle malestar en eventos de calor extremo», advirtió Harrington.

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Si tienes inquietudes relacionadas con el calor acerca de estos medicamentos, habla con tu médico. Nunca dejes de tomar medicamentos por tu cuenta.

Los bebés y los adultos mayores también tienen un mayor riesgo de problemas relacionados con el calor, pero todos deben tomar precauciones en caso de calor extremo.

«Es fácil deshidratarse ya que es posible que no te des cuenta de que tienes sed», indicó Harrington. «Si vas a estar en exteriores, es importante beber agua incluso si no crees que la necesitas. Bebe agua antes, durante y después de salir si está haciendo calor».

Aquí te mencionamos otras precauciones importantes para el clima cálido:

  • Evita estar al aire libre entre el mediodía y las 3 p.m., cuando el sol suele estar más fuerte. Cuando estés afuera, usa ropa ligera y de colores claros hecha de telas transpirables como el algodón o una tela más nueva que repela el sudor. Usa un sombrero y lentes de sol. Aplica un protector solar resistente al agua con un FPS de al menos 15 cada dos horas.
  • Para mantenerte hidratado, toma unas tazas de agua antes, durante y después del ejercicio. Evita la cafeína y el alcohol. Toma descansos regulares. Detente por unos minutos en la sombra o en un lugar fresco, hidrátate y comienza de nuevo.

 

Vía: Health Day News