Una de las principales responsabilidades de los padres de familia es velar por la salud integral de sus hijos. Lo cual no implica simplemente cuidar que no contraigan enfermedades o que desarrollen hábitos saludables, también consiste en asesorarlos con las dudas que tengan con los cambios que experimentan, especialmente en la pubertad.

La entrada a la pubertad es una etapa difícil, pues se trata de la transición entre pasar de ser niño a ser adolescente, con cambios marcados tanto física como mentalmente. Es un momento crucial para que los padres asesoren a sus hijos.

En la actualidad, quizá más que nunca antes, hablar sobre los temas relacionados con la pubertad es una tarea importante para los padres, ya que los avances tecnológicos han permitido que los niños estén expuestos a temas de sexualidad desde edades tempranas, y no toda la información que reciben procede de fuentes fiables.

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Algunos consejos para que los padres aborden este tema con sus hijos son:

1 No esperar a que sean los hijos quienes acudan con preguntas sobre los cambios en su cuerpo, ya que puede ser que ese día nunca llegue.

2 Lo más aconsejable es que los padres comiencen a hablar con sus hijos sobre los cambios por los que pasa el cuerpo a medida que crecen.

3 Es importante responder a las preguntas de los hijos sobre la pubertad siendo totalmente honestos y abiertos.

4 Cuando un niño tenga 8 años, idealmente ya debería saber cuáles son los cambios físicos y emocionales asociados con la pubertad. Aunque parezca una edad temprana, algunas chicas y chicos ya comienzan a experimentar cambios para ese entonces. Toma en cuenta que, de la misma manera en que es útil para los adultos anticipar cambios drásticos como, por ejemplo, una mudanza o cambio de trabajo antes de que ocurra, los hijos deberían saber acerca de la pubertad con antelación.

5 En el caso de las niñas, es fundamental que los padres hablen sobre la menstruación antes de que esta haga su aparición, pues si no saben lo que les sucede, puede que las pequeñas se asusten al ver la sangre y el lugar de donde proviene. La mayoría de mujeres tienen su primer periodo a los 12 o 13 años, aunque en algunas aparece antes o después de dicha edad.

6 Es recomendable que tanto las niñas se informen sobre los cambios por los que pasan los niños, como que ellos aprendan sobre los cambios que afectan a ellas. Especialmente si tienen hermanos, esto les ayudará a comprenderlos mejor.

7 Al hablar con los hijos sobre la pubertad, es importante que le asegure que estos cambios son completamente naturales. Esta etapa conlleva tantos cambios que es fácil que los pequeños se sientan inseguros. Es fundamental hacerles saber que todo forma parte del crecimiento y todos pasan por ello, aunque no al mismo ritmo.

8 Permíteles saber que siempre estarás disponible para hablar, pero también es importante que dediques un tiempo en particular para hacerlo.

9 Antes de responder a las preguntas de tus hijos, asegúrate de estar bien informado y de que tus propias dudas sobre la pubertad han sido despejadas. Si, a pesar de hablar contigo, tus hijos siguen teniendo preguntas o inquietudes que no puedes responder, pueden visitar a un médico.

 

Vía: Kid’s Health