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fuentes-animal-vegetal-omega-3-2Una nueva revisión de varios estudios sugiere que consumir regularmente pescado y otros alimentos ricos en ácidos grasos Omega-3 puede reducir el riesgo de enfermedad cardiaca fatal.

«Nuestros resultados apoyan la importancia del consumo de pescado y ácidos grasos Omega-3 como parte de una dieta saludable», señaló el doctor Dariush Mozaffarian, autor principal del estudio y decano de la Escuela Friedman de Nutrición y Ciencias Políticas en la Universidad de Tufts, en Boston.

«En un momento en donde algunos pero no todos los ensayos sobre el uso de suplementos de aceite de pescado han demostrado beneficios, existe incertidumbre sobre los efectos cardiovasculares de los ácidos grasos omega-3», destacó Mozaffarian.

Los peces son la principal fuentes dietética de ácidos grasos Omega-3. Los pescados grasos, como el salmón, la trucha, las anchoas, las sardinas y el arenque, representan la fuente más rica de estos nutrientes.

Las nueces, el aceite de linaza, el aceite de canola y algunas otras semillas y frutos secos contienen Omega-3 de origen vegetal, conocido como ácido alfa-linolénico.

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Para el estudio, los investigadores analizaron 19 estudios llevados a cabo en 16 países que reclutaron a casi 46,000 personas. De ellas, alrededor de 8,000 sufrieron un primer infarto a lo largo del tiempo, lo que resultó en 2,781 muertes.

Los Omega-3 provenientes de plantas y mariscos no se asociaron con un menor riesgo de infartos no fatales. Pero mostraron una relación con un riesgo 10 por ciento más bajo de ataques cardíacos fatales, pese a que el estudio no puede demostrar una relación directa de causa y efecto.

«Estos nuevos resultados, incluyendo muchos estudios que previamente no habían presentado sus conclusiones, otorgan la descripción más completa hasta la fecha de cómo los Omega-3 pueden influir en las enfermedades del corazón», subrayó Liana Del Gobbo, líder del estudio e investigadora post-doctoral en la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford. «A través de estos diversos estudios, los resultados también fueron consistentes según la edad, el sexo, la raza, la presencia o ausencia de diabetes, y el uso de aspirina o medicamentos reductores del colesterol».

El estudio fue publicado hoy en la revista Archives of Internal Medicine.

 

Vía: HealthDay News