La sarna es una enfermedad común y contagiosa de la piel que es causada por un parásito, llamado arador de la sarna. Este se introduce debajo de la piel y se alimenta de las células superficiales.
Esta afección puede extenderse rápidamente en lugares con mucha gente en los que hay contacto frecuente con la piel de otras personas, como los hospitales, los centros de cuidado infantil y los asilos de ancianos, por ejemplo.
La sarna se caracteriza por la presencia de una multitud de vesículas que producen síntomas como:
-Irritación o erupción parecida a las espinillas.
-Picazón intensa, especialmente durante la noche.
-Llagas causadas por rascarse.
De acuerdo con expertos, si una persona o algún familiar de esta contrae sarna, se deben tomar medidas de inmediato.
“La mayoría de personas contraen la sarna mediante contacto de piel con piel, aunque es posible contraer la sarna por la ropa de cama, la ropa y los muebles infestados”, indicó el doctor Joshua Zeichner, profesor asistente de dermatología en la Facultad de Medicina Icahn de Mount Sinai, en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
“Dado que la sarna es contagiosa, tiende a propagarse con facilidad entre los niños, las madres con hijos pequeños, y los residentes de hogares para ancianos y centros de cuidados a largo plazo”, agregó el especialista.
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La Academia Americana de Dermatología (AAD, por sus siglas en inglés), recomienda que ante cualquier sospecha de haber contraído sarna se debe acudir al médico lo antes posible, ya que los medicamentos para esta enfermedad sólo están disponibles bajo prescripción médica.
La AAD destaca que el día que comience el tratamiento, se debe lavar toda la ropa, incluyendo la ropa de cama y las toallas en agua caliente. Posteriormente, se debe secar todo en una secadora por calor.
También es importante pasar la aspiradora por toda la casa el día que comience el tratamiento. Al acabar, se debe tirar la bolsa de la aspiradora o, en su defecto, lavar el contenedor de la misma con agua caliente y jabón.
Debido a que la sarna es altamente contagiosa, el doctor Zeichner señaló que, en caso de ser diagnosticado con sarna, es importante notificar a las personas cercanas. En caso de recibir tratamiento contra esta afección, las personas que viven con el paciente o que tienen un contacto cercano también necesitan tratamiento. De lo contrario, pueden adquirir la afección y repetir el contagio.
Finalmente, las mascotas no deben recibir tratamiento alguno, ya que el arador de la sarna humana no puede sobrevivir en animales, puntualizó el dermatólogo.
Vía: Health Library
