Obesidad y nutrición, Salud Mental
Es sabido que el consumo excesivo de alimentos procesados pone en riesgo la salud. Entre sus principales consecuencias destacan las enfermedades crónicas, como obesidad, diabetes e hipertensión arterial. Además, este tipo de productos también afectan la salud del cerebro e influyen en la pérdida de memoria conforme avanza la edad, según la investigadora de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Selene Cansino Ortiz.
De acuerdo con un estudio realizado a más de 1,600 personas de entre 21 y 80 años de edad, en el Laboratorio de Neurocognición de la Facultad de Psicología de la UNAM, a partir de los 21 años de edad las personas olvidan el 63% del contexto en que ocurren sus experiencias. Este proceso natural sucede en el ser humano cada año.
¿Qué podemos hacer para evitar la pérdida de memoria? Las vitaminas comercializadas como supuestos auxiliares para reforzar la memoria o alentar su proceso de pérdida son un mito, debido a que no hay pruebas científicas que demuestren su eficacia. En contraparte, se ha demostrado que el vino tinto y los ácidos grasos Omega-6 —pescado— ayudan a reforzar la memoria y a postergar su pérdida con el paso del tiempo.
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Para Selene Casino, es importante mantener activo el cerebro a través de estimulaciones de aprendizaje, ejercicios cognitivos —jugar ajedrez y aprender un idioma, por ejemplo— y actividades que exijan al cerebro el consumo de energía.
Si has olvidado detalles de ciertos acontecimientos con el paso de los años, no te preocupes. Es normal olvidar algunas cosas durante la vida cotidiana; de hecho, es una función del ser humano para adaptarse, “es decir, la memoria es una herramienta que sirve a la persona para adaptarse lo más armónicamente a su contexto, a su diario vivir”, dijo.
Si sientes que tu pérdida de memoria no es normal, visita de inmediato a un experto en salud mental.
Vía: Notimex
