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Una condición degenerativa como la osteoartritis puede ocasionar una pérdida de cartílago. Al haber menos amortiguación entre las articulaciones, lo más seguro es que experimentes dolor e hinchazón.

La glucosamina es un suplemento generalmente derivado del cartílago animal. Es común que se combine con la condroitina, otro compuesto que se encuentra en el cartílago.

Tomar estos suplementos puede ayudar a proteger el cartílago, retrasar su erosión y, en última instancia, reducir los síntomas típicos de osteoartritis, como dolor e inflamación.

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Aunque un estudio evaluó a estos suplementos obteniendo resultados mixtos respecto a la efectividad de cualquiera de ellos, existe cierta evidencia de que pueden ayudar a frenar el dolor en las articulaciones.

Otras investigaciones muestran que ambos ingredientes son seguros, por lo que puedes probarlos sin preocuparte por los efectos secundarios desagradables.

Debido a que los suplementos, como la glucosamina y la condroitina, pueden interactuar con los medicamentos, es recomendable que hables con tu médico antes de tomarlos. Tales suplementos pueden interactuar, por ejemplo, con medicamentos anticoagulantes como la warfarina.

 

Fuente: Healthline