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ira-coche-iCuando las cosas no salen como se esperaban, los pensamientos pueden caer en un espiral e irse hacia abajo. Este tipo de situaciones fomentan sentimientos de enojo que a veces son fugaces, pero en ocasiones se transforman en una furia total.

Al igual que otras emociones, la ira se acompaña de cambios psicológicos y biológicos; por ejemplo, el aumento de la frecuencia cardíaca, la presión arterial, los niveles de hormonas de energía, adrenalina y noradrenalina.

Aunque normal y, por lo general, saludable, cuando se pierde el control del enojo se vuelve un asunto destructivo capaz de afectar todas las esferas de la vida. Por ello, es importante aprender a cambiar algunas actitudes y formas de pensar y, así, mantener la ira bajo control.

El objetivo del manejo de la ira es reducir los sentimientos emocionales y los aspectos fisiológicos que provoca. Si no puedes cambiar o evitar las cosas que te enojan, puedes controlar tus reacciones.

La manera más sana de combatir este sentimiento es expresarlo con firmeza, pero sin agresividad. Para lograrlo se debe aprender cómo dejar claras cuáles son las propias necesidades y cómo realizarlas sin lastimar a otros: ser firme no significa ser prepotente ni exigente, sino respetarse a sí mismo y a los demás.

Es importante comprender que esta emoción produce que se actúe de manera irracional. Cuando se sienta, es necesario dar un paso atrás y comprobar que se está reaccionando de una forma lógica.

Al referirse a los problemas propios o inclusive a los que afectan a otros, no deben utilizarse palabras como “siempre” o “nunca”.

En lugar de mantener la atención en las dificultades, es mejor enfocarse en los objetivos y en la forma en la que se planea alcanzarlos.

Dar órdenes y ser demandante son actitudes que deben evitarse. Es mejor aprender a hacer peticiones.

Cuando se siente que la ira está fuera de control y que está afectando la calidad de vida, se debe buscar un especialista que, mediante su asesoría, ayude a mantenerla bajo control.

Vía: HealthDay News, American Psychological Association