Durante la adolescencia se llevan a cabo un buen número de cambios, tanto físicos como mentales. Y una de las consecuencias más visibles de los cambios hormonales que se experimentan durante esta etapa es el acné.

Se conoce como acné a una enfermedad común de la piel, la cual provoca que aparezcan espinillas -o granos-. Estos se forman cuando los folículos que se ubican debajo de nuestra piel se tapan. La mayoría de las espinillas aparecen en el rostro, el cuello, la espalda, el pecho y los hombros.

A pesar de que suele aparecer generalmente durante la adolescencia, no es raro que el acné también aparezca en personas adultas.

Conoce más: 5 consejos para una exfoliación segura y saludable para tu piel

La buena noticia es que existen consejos y tips que ayudan a combatir y prevenir este frecuente problema de la piel. Algunos de ellos son:

1 Desmaquillarse antes de ir a la cama. Asimismo, al comprar maquillaje, se debe elegir aquellos productos en cuya etiqueta o envoltorio especifique que son “no comedogénicos” o “no acnegénicos”.

2 En caso de utilizar lentes graduados o gafas de sol, estos deben limpiarse a menudo para evitar que la grasa obture los poros que tenemos alrededor de los ojos y la nariz.

3 Evitar tocarse la cara con las manos, o apoyarla en objetos que tienden a acumular sebo y residuos de la piel, como el teléfono celular. Al tocarnos la cara, se puede dispersar por ella las bacterias que hacen que los poros se inflamen e irriten. Para mantener las bacterias a raya, se deben lavar las manos adecuadamente antes de aplicarnos cualquier producto en la cara.

4 Evitar reventar los granos. Aunque es tentador, lo más recomendable es no hacerlo, ya que al reventarse un grano, se puede empujar material infectado hacia capas más profundas de la piel, provocando más inflamación y enrojecimiento. Si un grano aparece justo antes de un acontecimiento o celebración importante, lo más aconsejable es que un dermatólogo lo trate.

5 Lavarse la cara dos veces al día con agua tibia y un jabón suave fabricado específicamente para personas con acné. El lavado debe consistir en un suave masaje a la cara, con movimientos circulares (no se debe frotar la cara).

6 Mantener el cabello limpio y evitar que entre en contacto con el rostro, para que la grasa y la suciedad que contiene no obture los poros de la piel.

7 Proteger la piel del sol. El bronceado puede empeorar el acné, en vez de mejorarlo. El sol también provoca lesiones en la piel que, a la larga, favorecen la aparición de arrugas e incrementan el riesgo de desarrollar cáncer de piel.

8 Si se tiene acné en otra parte de cuerpo, se debe evitar el uso de prendas ajustadas, ya que no permiten que la piel respire y pueden provocar irritación. Las bufandas, cintas para el cabello y gorros también tienden a acumular grasa y suciedad.

 

Vía: Kid’s Health