La uña del pie encarnada puede aparecer en cualquier momento y ser muy dolorosa. Es resultado de muchos factores, pero los zapatos apretados y un mal arreglo de las uñas del pie son las causas más comunes.
La piel a lo largo del borde de una uña puede ponerse roja y resultar infectada. Es más común que ocurra en el dedo gordo del pie; sin embargo, cualquier uña puede resultar afectada.
Otras razones son:
- Cortar demasiado las uñas o redondearlas.
- Hurgar o desgarrar las esquinas de las uñas.
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¿Qué hacer?
Si sufres de diabetes, daño en nervios de la pierna o el pie, mala circulación o una infección alrededor de la uña, debes ir enseguida al médico. Si no es así, puedes tratar la uña encarnada desde casa.
1. Empapa el pie en agua caliente de 3 a 4 veces por día. El resto del tiempo, mantén el dedo del pie seco.
2. Aplica suavemente un masaje sobre la piel inflamada.
3. Coloca un pedazo pequeño de algodón o seda dental bajo la uña. Moja el algodón con agua o antiséptico.
Al recortar las uñas de los pies:
4. Empapa brevemente el pie en agua caliente para ablandar la uña.
5. Usa un cortaúñas limpio y afilado.
6. Recorta las uñas del pie de manera recta a lo largo de la punta. No redondees las esquinas ni las recortes demasiado.
7. No trates de recortar la parte enterrada de la uña tu mismo, eso sólo empeorará el problema.
Considera la posibilidad de usar sandalias hasta que el problema haya desaparecido. Recuerda que las medicinas de venta libre pueden ayudar con el dolor, pero no tratan el problema.
Si esto no funciona, acude con tu médico de cabecera, un especialista en pies (podólogo) o un especialista en piel (dermatólogo).
