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Navidad es la temporada para ser generoso. ¿Y qué mejor motivo para dar que regalar salud? Hay muchas formas saludables de hacer una diferencia, desde leer a los niños en el hospital hasta compartir información médica con científicos, donar sangre, etc. A continuación te mencionamos algunos actos de amabilidad que son relativamente simples, mientras que otros requieren de más reflexión y compromiso.

No importa de qué manera elijas ayudar a los demás, regalar significa que también recibirás algo inesperado a cambio. Los estudios psicológicos muestran que dar es bueno para el bienestar personal, así como para reducir los niveles de estrés de tu cuerpo (disminuye el cortisol).

Por lo tanto, a medida que se acerque el ajetreo y el bullicio de las fiestas, considera las siguientes maneras de dar alegría a los demás. Tus esfuerzos podrían ayudar a consolar a personas que realmente lo necesitan, mejorar las opciones de tratamiento para las generaciones venideras o incluso salvar vidas.

Aquí las opciones:

1. Conviértete en voluntario

La amabilidad de los voluntarios puede hacer que las hospitalizaciones sean más fáciles para los pacientes y sus familias. Por ejemplo, muchos hospitales requieren voluntarios para que les lean a los niños que reciben atención hospitalaria, para jugar con los hermanos de los pacientes en las áreas de espera y para trabajar en la tienda de regalos o comida del hospital.

También se necesitan voluntarios para conversar y hacerles compañía a los pacientes; incluso aquellos que son profesionales certificados en Reiki, una técnica de curación con energía práctica, brindan su tiempo y servicios a pacientes con cáncer.

Para obtener más información y una lista de las oportunidades de voluntariado actuales comunícate al teléfono de tu centro de salud más cercano. También puedes consultar los sitios web de los hospitales para hallar oportunidades de voluntariado cerca de ti.

2. Contribuye con tus registros médicos y muestras para pruebas

¿Quieres ayudar a los científicos a lograr nuevos avances médicos? Aquí hay algo que puedes hacer y no requiere prácticamente de ningún esfuerzo: permite que tus registros médicos electrónicos y tus muestras de sangre o tejidos sobrantes de otras pruebas estén disponibles para los investigadores.

«En la Universidad de Yale, los científicos pueden usar información de registros médicos y muestras de sangre o tejido para investigación, a menos que los pacientes opten por no participar», indica Robert Sherwin, director del Centro de Investigación Clínica de Yale y profesor de endocrinología en la Facultad de Medicina de dicha institución. «Este tipo de información es importante para ayudarnos a comprender mejor las enfermedades y desarrollar nuevos tratamientos que puedan beneficiar a muchas personas».

Los datos que los científicos obtienen de la información médica les ayuda a desarrollar nuevas pruebas o medicamentos para combatir enfermedades. Incluso puedes ayudarlos a aprender más sobre las enfermedades que se transmiten a través de las familias.

Toma en cuenta que la información recopilada de registros médicos y muestras no afecta ni cambia tu atención, y tu privacidad se encuentra protegida.

Para obtener más información sobre cómo hacer esto, acércate a los centros e institutos de investigación en salud de universidades y del gobierno, donde te asesorarán para tal fin.

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3. Dona sangre

La Cruz Roja Mexicana necesita donaciones durante todo el año y la necesidad puede ser grande durante la temporada vacacional. (Acción de gracias, Navidad y Año Nuevo se encuentran entre los días de asueto más mortales en cuanto a accidentes de tráfico, según un estudio del Insurance Information Institute).

Puedes decidir donar sangre completa, plaquetas o plasma. El tipo de donación que realices determinará la frecuencia con que puedes donar en los próximos meses y años. Para obtener más detalles o para localizar un receptor de sangre cerca de ti, comunícate a la Cruz Roja visitando www.cruzrojamexicana.org.mx o llamando al número de urgencias 911. Primero evaluarán tu elegibilidad, que se mide por tu salud, por lo que te programarán un análisis de sangre en la organización. Lo mismo ocurre si eliges donar sangre en una clínica u hospital específico.

4. Recicla los medicamentos

La eliminación adecuada de los medicamentos recetados es una buena acción que ayuda a garantizar que fármacos como los opioides no caigan accidentalmente en las manos equivocadas, comenta el doctor David Fiellin, médico de Yale Medicine, experto en medicina de adicciones y profesor de medicina de emergencia y salud pública en la Facultad de Medicina de Yale. Quita los medicamentos que ya no necesitas de tu botiquín, pero evita tirarlos en la basura o en el retrete, ya que puedes contaminar los acuíferos. En su lugar, deposítalos en un buzón o contenedor autorizado; están ubicados convenientemente en los departamentos de policía, las farmacias y los centros de salud. Busca en internet lugares aprobados para la devolución de medicamentos cerca de ti.

5. Únete a un ensayo clínico

Los ensayos clínicos son estudios de investigación que ayudan a los médicos a probar nuevos medicamentos; los resultados también pueden informar sobre estrategias para la prevención, el diagnóstico o el tratamiento de enfermedades. Cabe destacar que no tienes que estar enfermo para participar en un ensayo clínico.

«Muchos ensayos necesitan voluntarios sanos para brindar información que se pueda comparar con las personas que tienen una afección o enfermedad», mencionó Sherwin. «Los ensayos clínicos son la única forma de descubrir si los nuevos tratamientos son seguros y efectivos. Cuando las personas participan en un ensayo clínico hoy, están ayudando a los pacientes del mañana».

Los ensayos clínicos pueden tomar muchas formas. Algunos requieren una simple donación de sangre para que los investigadores la analicen. Otros implican someterse a un nuevo tratamiento médico o quirúrgico. También existen ensayos que miden cómo los cambios en el estilo de vida afectan tu salud. Algunas veces, los investigadores prueban nuevos medicamentos o quieren saber si un medicamento aprobado para un tipo de enfermedad funcionará para una condición médica completamente distinta. Visita los sitios web de centros, institutos y hospitales para obtener más información sobre su investigación clínica y buscar ensayos disponibles para los cuales seas elegible.

6. Conviértete en donante de órganos en vida

Cirujanos del Centro para Donantes de Órganos en Vida del Hospital New Haven de Yale están reclutando personas para ayudar a expandir un programa pionero que conecta a los donantes vivos, que están dispuestos a donar un riñón o una parte de su hígado, con los receptores que lo necesiten. (Gracias a las cirugías innovadoras, como los trasplantes de hígado dividido, una sección donada de tu hígado a veces puede ayudar a dos o más receptores).

«Hay mucha buena voluntad en las personas», señala Sanjay Kulkarni, director médico del Centro para Donantes de Órganos en Vida. «Vemos personas que no conocen muy bien a su destinatario, dígase un compañero de trabajo o alguien en su grupo de la iglesia. En muchos casos, todo lo que necesitan es más información sobre el procedimiento antes de tomar la decisión de donar».

Si deseas donar un riñón pero tu tipo de sangre no coincide con el de tu receptor, no todo está perdido. Puedes ser parte de un «intercambio», lo que significa que tu nombre y el de tu destinatario se ingresan en un programa computacional que devuelve una lista de múltiples donantes y destinatarios, lo que ayuda a salvar muchas vidas. En México, la Fundación Carlos Slim promueve la campaña permanente «Héroes por la Vida», donde son expertos en el tema y puedes informarte sobre todo lo que requieres para convertirte en donante y regalar vida esta navidad. Para ello, sólo debes acceder a su sitio en línea heroesporlavida.org.

 

Vía: Yale Medicine