Aunque para muchas personas se trate de acciones desagradables, los procesos que consisten en eliminar los desechos corporales son fundamentales para la salud integral y forman parte de las necesidades fisiológicas que tenemos todas las personas.

Pese a ser necesidades que todos compartimos, a muchas personas les cuesta trabajo hablar cuando tienen algún problema referente a estas acciones, como la dificultad para orinar, por ejemplo.

Los problemas e infecciones urinarias son más comunes de lo que se cree, y la mayoría de ellas son fácilmente tratables si se diagnostican oportunamente. Sin embargo, de no recibir atención -muchas veces por la vergüenza que pueden llegar a sentir las personas que las padecen- se pueden transformar en problemas más graves.

Aunque la mayoría de estos problemas de salud suelen no agravarse de ser tratados oportunamente, existe uno de ellos que puede representar una seria amenaza: el Síndrome de Fowler.

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Se trata de una afección muy poco común y consiste en el vaciado incompleto de la vejiga, lo que resulta en la retención de líquidos.

De acuerdo con el Servicio de Urología del Hospital Clínico San Carlos Madrid, en España, los síntomas de los pacientes que aluden al Síndrome de Fowler se dividen en dos etapas:

Fase de llenado de la vejiga:

1 Urgencia para orinar.
2 Aumento anormal del número de veces que se necesita ir a orinar por la noche.

Fase de vaciado de la vejiga:

3 Disminución de la fuerza y calibre del chorro.
4 Orinar prolongadamente.
5 Sensación de vaciado incompleto tras orinar.

De presentar estos síntomas, los especialistas en salud recomiendan ir al médico, pues aunque lo más seguro es que se trate de alguna infección urinaria, lo mejor es prevenir.

Asimismo, para evitar tener problemas urinarios, los médicos recomiendan llevar a cabo acciones como:

-Beber líquido abundante.

-No retener la orina.

-Orinar después de mantener relaciones sexuales.

 

Vía: Su Médico