La hormona testosterona es responsable de las características masculinas, como son el vello facial y corporal, el desarrollo muscular, la regulación del deseo sexual, la producción de esperma y la salud ósea.

La baja cantidad de testosterona puede causar pérdida de cabello y músculos, cambios en el estado de ánimo, menos energía y testículos más pequeños, afirma la Endocrine Society.

Si tu médico detecta niveles bajos de testosterona, es posible que te recete una terapia de reemplazo hormonal. Las formas comunes de complementar la producción natural del cuerpo de esta hormona incluyen inyecciones, gel, parches para la piel o tabletas.

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No obstante, el uso de la terapia de testosterona a largo plazo tiene algunos riesgos, subraya la Endocrine Society, por lo que debes estar consciente de ellos y tenerlos en cuenta. Estos incluyen los siguientes:

  1. Ampliación de la próstata.
  2. Alto recuento de glóbulos rojos.
  3. Acné.
  4. Apnea del sueño: breves pausas en la respiración durante el sueño.
  5. Acumulación de líquido en los tobillos, los pies y las piernas.

Recuerda que ciertas afecciones (problemas con las glándulas en el cerebro —hipotálamo e hipófisis— que controlan la producción de hormonas, función tiroidea deficiente y obesidad principalmente), medicamentos o lesiones también pueden llevar a que tengas niveles bajos de testosterona. Asimismo, el nivel de la hormona va disminuyendo naturalmente con la edad, haciéndolo a partir de los 30 a 40 años.

 

Vía: Health Day News / Medline Plus