Ponerse los tenis y comenzar a correr puede parecer una decisión sencilla. Sin embargo, permanecer y mantener el ritmo de un entrenamiento llega a dificultarse cuando no están bien planteados los objetivos personales.

En este sentido, es sumamente importante establecer metas y no dejarlo todo en un intento. Sigue estos consejos.

  1. Encuentra el par correcto de tenis. Antes de comenzar, es fundamental que elijas el calzado correcto, con el fin de evitar lesiones. Considera que vale la pena la inversión, pues un buen par de tenis te proveerá confort y ayudará a que progreses en cada sesión.
  2. Decide qué días correrás y haz un compromiso. Escribe en tu calendario cuándo y a qué hora del día vas a correr. Según especialistas en el tema, los corredores matutinos tienden a ser más consistentes y tienen mayor rango para no fallar.
  3. Piensa en un plan de entrenamiento. Hacerlo te ayudará a saber cómo debes correr. Intenta ser muy específico y procura que el plan se acople a tu nivel de actividad física. Toma en cuenta que tu avance debe ser progresivo. Si eres principiante, comienza con caminatas de 30 minutos sin parar.
  4. Comparte tus logros con amigos y familiares. Además de recibir apoyo, puedes convertirte en motivo de inspiración. Esto te ayudará a no detenerte, así como a crear un buen ambiente para seguir corriendo.
  5. Pide la asesoría de expertos. Si no puedes pagar un entrenador, consulta páginas en las que especialistas den consejos sobre cómo continuar con tu progreso. Pregunta, indaga y conoce cada detalle.

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* Recuerda que es importante visitar a un médico y realizarse un chequeo completo antes de empezar con cualquier tipo de entrenamiento.

 

Vía: Runner’s World