La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en Estados Unidos, y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) en México, no regulan los suplementos alimenticios en el mismo grado que los medicamentos recetados.

Por lo anterior, la Sociedad Americana del Cáncer enfatiza que debes hablar con tu médico antes de tomar cualquier suplemento, incluyendo los que son vitaminas.

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La sociedad desmiente o desacredita los siguientes mitos populares sobre los suplementos alimenticios:

1. «Megadosis» –  Más es mejor

No existe evidencia científica de que el uso de grandes dosis efectivamente combata una enfermedad. De hecho, consumir dosis elevadas de ciertas vitaminas puede ser tóxico o inhibir la absorción de otras vitaminas y minerales.

2. «Todo lo natural» es mejor

Los suplementos que afirman ser «100% naturales» no siempre son más seguros que las sustancias refinadas o fabricadas.

3. Se ha utilizado durante miles de años, por lo que debe funcionar

Los medicamentos tradicionales no son garantía automática de que sean seguros o eficaces.

4. No es dañino tomar suplementos junto con mis medicamentos regulares

Algunos suplementos pueden afectar la capacidad del cuerpo para absorber medicamentos recetados y de venta libre.

5. Si pudiera lastimarme, no se les permitiría venderlo

Ni la FDA ni la COFEPRIS tienen la autoridad reguladora para verificar cada reclamación hecha sobre un suplemento.

 

Vía: Health Day News