Cuando tienes cálculos renales, es necesario que hagas un cambio en la dieta. Deberás evitar los alimentos con alto contenido de ciertas sustancias, como el oxalato, que pueden provocar la formación de más cálculos renales. Pero ten cuidado con las listas exhaustivas de alimentos que se deben evitar, señala el doctor Brian Eisner, codirector del Programa de Cálculos Renales del Hospital General de Massachusetts (Estados Unidos). «Hay mucha desinformación en Internet sobre la relación entre el consumo de ciertos alimentos y el riesgo de desarrollar cálculos renales».
Por ello, para ayudar a prevenir la recurrencia de cálculos renales, es importante que sigas estas reglas dietéticas:
1. Consume suficiente calcio en la dieta
Los niveles bajos de calcio en realidad aumentan los niveles de oxalato en la orina. Trata de consumir de 1,000 a 1,200 mg de calcio al día y consíguelo de fuentes alimenticias como leche baja en grasa o yogur, en lugar de pastillas.
2. Reduce la sal
Demasiada sal en tu dieta aumenta el calcio excretado en la orina. Intenta consumir 2,300 mg o menos por día.
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3. Limita la proteína animal
Comer mucha proteína animal, incluida la carne roja, el pescado o el pollo, puede aumentar los niveles de ácido úrico en la orina. «Puedes consumir dos porciones de proteína animal al día», aconsejó Eisner. Una porción es aproximadamente del tamaño de la palma de tu mano.
4. Bebe más líquidos
Trata de consumir de dos a tres litros (alrededor de 10 a 12 tazas) de líquido por día, para diluir los cristales en la orina. «Puedes beber lo que quieras, pero evita las bebidas endulzadas con azúcar, que aumentan el riesgo de formación de cálculos», recomendó Eisner. Se ha demostrado que beber media taza de jugo de limón diluido con agua todos los días ayuda a inhibir la formación de cálculos renales. Beber café, té, cerveza, vino o jugo de naranja se asocia con un menor riesgo de cálculos, según una investigación de la Universidad de Harvard.
5. Sigue una dieta DASH
La dieta DASH (Enfoques Dietéticos para detener la Hipertensión) está relacionada con un riesgo reducido de cálculos renales. Enfócate en las frutas y verduras, así como en los productos lácteos bajos en grasa, la fibra dietética y los granos integrales. Finalmente, limita al máximo aquellos productos con azúcar añadida.
