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La cuarentena por COVID-19 ha llevado a que la alimentación de la personas se descontrole un poco, lo que puede derivar en afecciones no deseadas e innecesarias que solo aumentarán el riesgo de contraer coronavirus por tener que atenderlas. Ejemplo de ello son las famosas «piedras en los riñones», médicamente conocidas como cálculos renales.

Una dieta rica en sal (cloruro de sodio) aumenta el riesgo de cálculos renales de calcio. Según la Urology Care Foundation, tener demasiada sal en la orina evita que el calcio se reabsorba de esta hacia la sangre, lo que a su vez ocasiona niveles altos de calcio en la orina y puede provocar cálculos renales.

Comer menos sal ayuda a mantener más bajos los niveles de calcio en tu orina. Cuanto menor sea el calcio en la orina, menor será el riesgo de desarrollar cálculos renales.

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Por ello, para reducir tu consumo de sodio y prevenir la formación de cálculos renales durante la cuarentena, lee atentamente las etiquetas de los alimentos. Asimismo, es importante limitar al máximo, o de preferencia evitar, estos alimentos conocidos, los cuales poseen un alto contenido de sodio:

  1. Alimentos procesados, como papas fritas y galletas saladas
  2. Sopas enlatadas
  3. Vegetales enlatados
  4. Carnes procesadas
  5. Condimentos
  6. Alimentos que contienen glutamato monosódico
  7. Alimentos que contienen nitrato de sodio
  8. Alimentos que contienen bicarbonato de sodio

RECUERDA: Para dar sabor a los alimentos sin usar sal, prueba con hierbas frescas o una mezcla de condimentos a base de hierbas sin sal.

 

Vía: Healthline