Se conoce como calambres a la contracción de algún músculo, la cual suele aparecer de forma súbita, fuerte, dolorosa e involuntaria.
Aunque los calambres ocurren en cualquier músculo del cuerpo, la pantorrilla es el lugar donde se sienten con mayor frecuencia, indicó Verónica Sánchez Nuño, especialista en medicina de la actividad física y deportiva.
Pese a que duelen bastante, los calambres son inofensivos y son provocados, principalmente, por un proceso de deshidratación o por mantener una tensión muscular durante un tiempo prolongado.
Otras posibles causas de su aparición son:
-Hacer un ejercicio de manera repetitiva.
-Falta de un adecuado riego sanguíneo.
-Comprensiones en los nervios periféricos
-Algún desequilibrio entre los aportes de los minerales, como potasio y calcio, dentro de la dieta.
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De acuerdo con la experta, algunos consejos para prevenir estas molestas y dolorosas contracciones son:
1 Aprender a realizar un ejercicio correctamente.- Cuando una persona no está acostumbrada a realizar ejercicio de forma regular, existe una alta probabilidad de que sufra un calambre, debido al impacto del entrenamiento. Esto se puede contrarrestar aprendiendo cómo hacer dicha actividad de forma correcta.
2 Evitar hacer ejercicio cuando haya exceso de calor y/o humedad.- El ambiente es otro factor que influye, si una persona se ejercita en condiciones de mucha humedad o demasiado calor, el potencial de deshidratarse es muy alto, lo cual potenciará el riesgo de sufrir calambres.
3 Evitar el sedentarismo prolongado.- Cuando permanecemos mucho tiempo sentados, los músculos se comienzan a contracturar por estar demasiado tiempo en la misma posición, lo que aumenta el riesgo de padecer una mala circulación en las piernas, en músculos periféricos y en vasos sanguíneos.
4 Realizar estiramientos.- “Al término de cualquier sesión de ejercicios es importante que las personas realicen una parte de estiramientos estáticos para que puedan regresar al músculo a su posición original”, apuntó Sánchez Nuño.
5 Cuidar la alimentación.- Si bien no existen alimentos milagrosos, sí hay aquellos que tienen más aporte de algunos electrolitos como el potasio, y estos son el plátano o el jitomate. Se aconseja acudir con un nutriólogo para saber el nivel de estos micronutrientes que evitan la deshidratación.
Vía: Notimex
