¿Quién de nosotros no ha experimentado hechizos de cansancio o falta de energía, a menudo en los peores momentos posibles, cuando solo queremos terminar de hacer las cosas?
Las razones por las que puedes sentirte cansado(a) y agotado(a) pueden variar desde algo simple, como falta de sueño o lidiar con el estrés del trabajo, a otras mucho más complejas, como vivir con una enfermedad crónica o seguir un tratamiento para dicha enfermedad.
Aunque lidiar con la fatiga causada por una condición crónica puede ser más difícil, la formación de algunos buenos hábitos de estilo de vida puede ayudarte a maximizar tus niveles de energía en el día a día.
Por ello, te dejamos estos consejos para que te sientas más despierto(a) y alerta:
1. Ponle atención a tu dieta
Una de nuestras principales fuentes de energía es, por supuesto, la comida que comemos. Por lo tanto, si queremos mantener nuestros niveles de energía, debemos comer saludablemente e intentar integrar los alimentos más nutritivos en nuestras dietas.
2. Haz un poco de ejercicio ligero
Como lo explican especialistas de la Facultad de Medicina de Harvard en un informe dedicado, aunque el ejercicio puede no ser lo primero que querrás hacer cuando te sientas agotado de energía, sí ayudará a estimular tu cuerpo y tu mente en algunas formas vitales.
Entonces, ¿qué tipo de ejercicio debes hacer?
Un estudio reciente que involucró a cientos de participantes durante un período de 15 años confirmó que hacer sólo media hora de ejercicios aeróbicos ligeros, todos los días, te ayudará a mantenerte saludable y te brindará beneficios a largo plazo.
Conoce más: Siesta y salud: 5 lugares donde puedes “recargar pila”
3. Aparta tiempo para hacer yoga y meditación
Practicar yoga y meditación también puede ayudarte a aumentar tus niveles de energía. Esto se debe a que estas prácticas se centran en técnicas como la respiración consciente, que apuntan a promover un estado de calma.
4. Aprende a delegar tareas
Si no encuentras una estrategia decente para redistribuir algunas de las responsabilidades de tu día a día, al menos de vez en cuando, estas podrían llevarte al agotamiento y a una sensación constante de fatiga en tu vida cotidiana, lo cual no favorece para nada tu productividad ni tu felicidad.
Investigaciones han demostrado que las personas que invierten en la contratación de servicios dejan de preocuparse por algunas de las tareas domésticas que no les gusta o les es difícil realizar, para que no deban lidiar con la sobrecarga mental y física. De esta forma, tienen una mayor sensación de bienestar general.
5. No subestimes el sueño
Finalmente, es vital asegurarte de que tu sueño diario sea de buena calidad, para que evites la fatiga o te recuperes del efecto de la actividad estresante o cansada de todo el día.
Los científicos han asociado la interrupción del sueño con neurodegeneración, problemas de salud mental y una mayor predisposición a la preocupación, así que procura dormir 8 horas diarias.
Vía: Medical News Today
