Cuando la menstruación se detiene, tu cuerpo cambia radicalmente y de muchas maneras. Recuerda que el ejercicio es importante a lo largo de todas las etapas de tu vida, y la menopausia no es la excepción.

Por ello, el Consejo Americano del Ejercicio nos menciona algunos beneficios de ejercitarse durante la menopausia:

  1. Ayuda a reducir el riesgo de enfermedades del corazón y osteoporosis, que son más comunes después de la menopausia.
  2. Mejora tu estado de ánimo, al igual que reduce la ansiedad y la depresión.
  3. Te ayuda a perder más grasa del vientre.
  4. Ayuda a fortalecer tus huesos.
  5. Ayuda a mejorar el colesterol y la aptitud física.

No olvides que una rutina de ejercicios diaria aumenta tu capacidad de coordinación, tus reflejos y tu agilidad, lo que te ayudará a prevenir las caídas y mejorar el rendimiento físico en todos los aspectos de tu vida.

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Asimismo, siempre ten presente que en la menopausia se gana peso debido a la acumulación de grasa, produciéndose un cambio en la distribución de la misma, tendiendo a depositarse en la zona abdominal. Para que mantengas un índice de masa corporal (IMC) apropiado y evites esas «llantitas» antiestéticas y poco saludables, resulta imprescindible que compenses con una alimentación equilibrada y practiques ejercicio regularmente. Caminar a paso rápido durante 30 minutos diarios quizás sea todo lo que necesitas para mantener el peso ideal e, incluso, para que bajes de peso cuando lo requieras. No olvides que la obesidad es un factor de riesgo para diversas enfermedades, como la diabetes mellitus.

 

Vía: Health Day News / Webconsultas