Incluso poner en el microondas una esponja de cocina no la esterilizará de todas las bacterias dañinas; así lo asegura un estudio de la Universidad de Furtwangen en Alemania, refutando algunas investigaciones previas.

«Debido a que las esponjas son principalmente húmedas y diseñadas para la absorción, tienen el potencial de recoger bacterias como la salmonella, E. coli y estafilococo», indica la American Association of Retired Persons (AARP).

La asociación sugiere cómo mantener una esponja de cocina más limpia y segura:

  1. Reemplázala regularmente.
  2. Seca la esponja después de cada uso en un lugar seco, en lugar de hacerlo en el mostrador o en la parte inferior del fregadero.
  3. No limpies los derrames de pescado crudo, aves o carne con una esponja.
  4. No uses una esponja para limpiar los mostradores y repisas de la cocina después de preparar los alimentos.

Cabe destacar que otro grupo de científicos alemanes secuenció el ADN de microorganismos hallados en 14 esponjas de cocina, descubriendo bacterias como Moraxella osloensis, que puede causar infecciones en personas con un sistema inmunológico débil. La misma bacteria es responsable del mal olor en la ropa sucia y podría explicar el aroma desagradable de las esponjas de cocina usadas una y otra vez.

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«Nuestro trabajo demuestra que las esponjas de cocina albergan una diversidad de bacterias mucho mayor de lo que se pensaba», concluyeron Massimiliano Cardinale, del Instituto de Microbiología Aplicada de la Universidad Justus Liebeg en Giessen y colegas de otros centros en Alemania.

Y un serio problema identificado por los investigadores es que lavar las esponjas con agua y jabón aumenta la concentración de algunas bacterias.

Algunos especialistas recomiendan lavar las esponjas con una solución de lejía. De acuerdo con Philip Tierno, profesor del departamento de Microbiología y Patología del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York y autor del libro «La vida secreta de los gérmenes», la mejor opción es preparar una solución mezclando nueve partes de agua y una de lejía. Posteriormente y siempre usando guantes, se debe vertir la mezcla sobre la esponja y dejarla en esta solución entre 10 y 30 segundos. Por último, sugiere guardar la mezcla en un recipiente y tenerlo a la mano para limpiar la esponja cada vez que se use.

 

Vía: Health Day News / BBC Mundo