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Anticipar la llegada de un nuevo bebé puede hacer feliz el corazón de una mujer. Sin embargo, el embarazo también puede afectar este importante órgano de otras formas. De hecho, el corazón bombea cerca de un 50% más de sangre de lo habitual durante el embarazo. Y la creciente evidencia confirma que las mujeres embarazadas que experimentan complicaciones de salud, incluyendo presión arterial alta y diabetes gestacional, enfrentan un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en el futuro, así lo señala una declaración científica reciente de la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA).

Condiciones y complicaciones

Junto con la presión arterial alta y la diabetes gestacional, cuatro problemas de salud adicionales durante el embarazo pueden aumentar el riesgo de problemas cardiovasculares en el futuro:

  1. Parto prematuro (dar a luz antes de la semana 37 de embarazo).
  2. Dar a luz a un bebé que pesa menos de 2.28 kilos.
  3. Desprendimiento de placenta (cuando la placenta se separa del útero antes del nacimiento).
  4. Mortinato (muerte de un bebé antes del parto).

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RECUERDA: Alrededor del 10% al 15% de las mujeres experimentan estos u otros resultados adversos durante el embarazo, algunos de los cuales también pueden afectar la salud del bebé.

«Las mujeres que tuvieron uno o más de estos resultados adversos del embarazo deben estar conscientes de su mayor riesgo cardiovascular y compartir su historial con sus médicos, incluso si dieron a luz hace décadas», aconseja la doctora Kathryn M. Rexrode, jefa de la División de Salud de la Mujer en la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard y coautora de la declaración de la AHA.

Finalmente, no olvides que la enfermedad cardiovascular, o ECV, incluye ataques cardíacos, eventos cerebrovasculares, enfermedad vascular periférica (arterias estrechas en las piernas) e insuficiencia cardíaca. Acude con tu médico si tienes más dudas sobre cómo las complicaciones durante el embarazo pueden aumentar tu riesgo de ECV en el futuro.

 

Fuente: Harvard Medical School