Algunos juguetes y joyería para niños pueden contener niveles tóxicos de cadmio y plomo. Ambos son metales blandos y, si se ingieren, pueden causar problemas de salud graves, como retraso en el desarrollo cerebral, daño renal y óseo y cáncer, así lo advierte el Departamento de Salud de Minnesota (Estados Unidos).

Los niños menores de 6 años son más vulnerables porque pueden llevarse juguetes a la boca. En varias naciones se han promulgado diversas leyes que restringen y regulan los productos químicos tóxicos en los productos para niños que se venden en las tiendas, pero ¿qué pasa con las compras en línea?

Conoce más: 11 consejos para prevenir el envenenamiento en niños

A continuación te mostramos cómo puedes minimizar el riesgo de que tu hijo esté expuesto a uno de estos metales tóxicos:

  1. Investiga el producto que estás comprando. No hay forma de saber por apariencia que un producto es seguro. Evita comprar juguetes y joyería que no sabes de dónde provienen o dónde fueron hechos. Busca certificación libre de tóxicos. Siempre lee las etiquetas e información del producto cuidadosamente.
  2. Compra productos apropiados para su edad. En el caso de los niños pequeños, no compres joyas o juguetes para ellos a menos que estén etiquetados específicamente para niños menores de 6 años. Es posible que otros productos de este tipo no hayan sido sometidos a pruebas de seguridad para los niños. También es importante que los niños pequeños no reciban joyas usadas o viejas por esta misma razón.
  3. No permitas que tu hijo se ponga juguetes en la boca. La exposición tóxica puede ocurrir por morder, masticar o chupar un juguete o pieza de joyería, o lo que es peor, por tragarlos.

 

Vía: Mayo Clinic Health System