Sin importar la edad, es importante tener huesos fuertes, pues, más allá de ser el soporte el cuerpo, padecer enfermedades vinculadas a la masa ósea puede mermar la calidad de vida, al grado de reducir, considerablemente, el movimiento.

Conoce los alimentos que debes incorporar a tu dieta y evita sufrir lesiones. Recuerda que es indispensable consumir calcio y vitamina D.

  1. Leche

Los productos lácteos son la mejor fuente de calcio. Elige leche baja en grasa o descremada. Considera que menos cantidad de grasa, no significa menor porcentaje de calcio, según la Biblioteca Nacional de Medicina de E.U.

  1. Queso

Tan sólo 1.5 onzas (5 cubitos) de queso cheddar contienen más del 30% del calcio diario necesario. Las versiones bajas en grasas aportan calcio y no suman calorías.

  1. Yogur

Un vaso aporta 415 mg. de calcio y, si está fortificado, también suma vitamina D. Recuerda elegir yogur sin grasa o griego, y reforzado con vitamina D.

  1. Espinacas

Las hortalizas de hoja verde, como el brócoli, la col rizada, las acelgas y el repollo, son buenas fuentes de calcio. Una taza de espinaca cocida contiene el 25% del calcio recomendado, además de fibra, hierro y vitamina A.

  1. Pescado

El pescado es una excelente fuente de vitamina D. Tres onzas de atún en lata contienen el 39% de la dosis diaria de esta vitamina. Si no consumes suficiente vitamina D, tu médico puede recomendarte un suplemento. ¡No te automediques!

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  1. Granos enteros

Los granos y las legumbres secas fortalecen los huesos por su alto contenido de calcio, así lo señala la Biblioteca Nacional de Medicina de E.U. Recuerda que el cuidado de los huesos a través de la dieta, debe empezar desde la infancia.

  1. Cereales fortificados

Las cifras del aporte de calcio a través de los cereales fortificados van desde 100 mg. hasta 1,000 mg. Para saber si tienen suficiente calcio, te recomendamos leer las etiquetas; si dice 20% VD o más, ese alimento es alto en calcio.

  1. Jugo de toronja

El jugo de toronja es una buena opción para proveerse de vitamina D durante el desayuno. Procura consumirlo con la pulpa, pues suma antioxidantes. La vitamina D de la toronja se absorbe rápidamente en el cuerpo.

  1. Huevos

Los huevos son otra fuente de vitamina D, misma que se encuentra sólo en la yema. Estudios sugieren que añadir vitamina D y disminuir las calorías, puede ayudar a terminar con la obesidad más fácilmente.

  1. Soya

Puedes consumirla en forma natural u optar por la leche de soya envasada, que aporta una dosis de calcio.

Además de ingerir estos alimentos, te recomendamos limitar el consumo de alcohol y alimentos salados; así como no fumar, mantener un peso corporal saludable y realizar ejercicio con regularidad.

 

Vía: Hola Doctor