Es común escuchar que la ingesta de vitamina C ayuda a prevenir los resfriados, incluso se recomienda recurrir a ella en temporadas de frío. Pese a ello, diversos estudios han demostrado que esta vitamina y la planta equinácea —utilizada para impulsar el sistema inmunológico y aumentar las defensas del organismo— son más eficaces para acortar la duración y agresividad de los resfriados, no tanto para prevenirlos.
Si bien existen opiniones contradictorias al respecto, expertos aseguran que tomar vitamina C no ayuda a las personas a prevenir este tipo de enfermedad. No obstante, sí es recomendable tomarla antes de que aparezcan los primeros síntomas, pues ahí radica su poder para acortar su duración, según el Instituto Mayo Clinic.
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¿A quiénes beneficia el consumo de este nutriente? El efecto que provoca la vitamina C recae en todas las personas; sin embargo, es indispensable su ingesta en aquellas que enfrentan un alto riesgo de enfermar, como los niños que asisten a la guardería durante el invierno, o los adultos mayores que deben exponerse a climas fríos.
En cuanto al uso de la equinácea, los resultados son diversos. A decir de especialistas, se ha descubierto que su utilidad para prevenir o acortar los resfriados varía en cada caso. Las personas que han notado resultados muestran una disminución en la gravedad y duración de los síntomas cuando se toma en sus primeras etapas.
Es importante que el uso de cualquiera de los dos «remedios» se consulte con un especialista, debido a que pueden existir efectos secundarios. Toma en cuenta que otros hábitos pueden ayudar a reducir los malestares, como la hidratación constante, el reposo, las gárgaras, entre otros.
Vía: Notimex
