A decir de numerosos especialistas, el desayuno es la comida más importante del día. Sin embargo, debido al ritmo de la vida actual, la prisa por salir de casa para llegar a tiempo al trabajo, la escuela u otros compromisos, resulta sencillo saltárselo.
Tanto para los adultos como para los niños es un momento esencial del día, un alimento fundamental, pues después de una larga noche de descanso, es necesario comer para tener energía y poder llevar a cabo las actividades cotidianas.
Además, de acuerdo con la FAO, un desayuno saludable mejora el rendimiento físico y la concentración. Hacer el hábito de desayunar será un regalo a tu salud del que no te arrepentirás.
Por ello, para que puedas hacer del desayuno una prioridad, la American Academy of Pediatrics sugiere que los pequeños se vayan a la cama suficientemente temprano para que se levanten con tiempo de tomar su desayuno con calma.
Es primordial que dejes suficiente tiempo en la mañana para que tú y tus hijos puedan sentarse a comer sin tener sentimientos de prisa. En algunos casos, este espacio posibilita, incluso, que se mejore la comunicación familiar.
Si lo consideras necesario, prepara el desayuno la noche anterior. Puedes, por ejemplo, hacer huevos duros o rebanar la fruta para ganar algunos minutos por la mañana.
También puedes tener listos alimentos saludables para llevar, como rebanadas de manzana o bagels con crema de queso.
Para tener un desayuno saludable, es importante que no falte calcio, que puedes encontrar en la leche o yogur; fibras, presentes en los cereales y las vitaminas de frutas o jugos naturales.
Esta comida debería contener 25 por ciento, aproximadamente, del total de las calorías que se ingieren a lo largo del día.
¡Así que no lo pienses mucho y siéntate a desayunar!
Vía: HealthDay News, FAO
