Hacer que los niños coman bien en este regreso a clases puede ser todo un reto, pero la mejor y más fácil manera de comenzar es con el lunch que llevan a la escuela. Haz que el contenido de la lonchera de tus hijos sea más divertido, y será más probable que coman lo que les empacas. Los siguientes consejos creativos también harán que esta comida sea más nutritiva.

Comienza con un cambio de imagen del sándwich. Usa pan integral suave o pan integral sin gluten si es necesario, en lugar de blanco. Rellena el sándwich con proteínas de alta calidad, como rodajas de pollo asado o pavo. En lugar de untarle la tradicional mayonesa, prueba con una capa delgada de aguacate finamente machacado para agregar más fibra a tu dieta y a la de los tuyos, junto con nutrientes como la vitamina E y otros antioxidantes. Simplemente tritura la mitad de un aguacate maduro con un poco de limón y una pizca de sal y unta el pan. Para hacer sándwiches más atractivos, usa un cortador de galletas para convertirlos en formas divertidas.

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Las verduras, cruciales para el crecimiento y la salud general de tus hijos, suelen ser los alimentos que menos se quieren comer los niños. Una manera fácil de despertar su apetito es convertir las verduras en mini brochetas. Los niños pueden sentirse incómodos o inapetentes por llevar grandes trozos de comida, pero es un hecho que se los comerán si son trozos pequeños. Corta brócoli y coliflor previamente cocinados al vapor en pequeñas flores, y enróllalos en brochetas junto con tomates de uva. Llena un recipiente pequeño con una salsa sabrosa y saludable, como un aderezo de queso azul bajo en grasa, salsa BBQ, salsa de tomate baja en azúcar o una mostaza de miel casera sin grasa, solo mezcla cantidades iguales de miel y mostaza de tu elección.

Para el postre, las bayas son súper saludables. Como ya son del tamaño de un bocado, agrega interés empacándolas en un lindo y pequeño contenedor.

Finalmente e igual de importante, involucra a tus hijos con pequeñas tareas como envolver su sándwich o elegir una bebida saludable. Cuando los niños empacan su almuerzo, también son más propensos a comerlo.

 

Vía: Health Day News