Algunos peligros relacionados con el frío son obvios, pero otros son más difíciles de observar. Si debe trabajar expuesto al frío, recuerde siempre estar preparado y bien informado.
Los trabajadores expuestos al frío, enfrentan muchos riesgos. Algunos peligros relacionados con el frío son obvios, pero otros son más difíciles de observar. A veces, puede pensar incluso que no hace mucho frío, pero una lesión ocasionada por el frío puede causarle gran daño.
Los trabajadores que deben permanecer en el exterior expuestos al frío deben usar ropa abrigada adecuada para el clima o usar varias capas de ropa suelta. Usar ropa en capas asegura un mejor aislamiento. Las manos deben estar protegidas con guantes y la cabeza con un gorro y/o capucha. En condiciones de humedad, los zapatos deben ser impermeables y tener buena tracción. Asegúrate de que tu equipo para el frío no limita tu movilidad ni bloquea tu visión.
Prepárate para trabajar expuesto al frío, aun cuando las temperaturas no sean extremas. Es obvio que el frío intenso y los vientos huracanados pueden ocasionarte daños; sin embargo, ¿sabías que puedes padecer lesiones relacionadas con el frío aun en temperaturas cálidas de hasta 15.5 grados centígrados?
Hipotermia
Uno de los mayores peligros de trabajar expuesto al frío es probablemente el más difícil de detectar. La hipotermia ocurre cuando la temperatura de tu cuerpo cae por debajo de 35°C. Con una leve hipotermia puedes sentirte confundido y probablemente no te des cuenta del problema hasta que sea muy tarde. Tener demasiado frío también puede nublar el juicio y 
hacerte cometer errores mientras trabajas, y los errores a veces pueden ser mortales. Los primeros síntomas de hipotermia incluyen: escalofríos, sensación de cansancio, torpeza y confusión. En la medida de que tu cuerpo pierde calor, el estremecimiento puede desaparecer, tu piel puede tornarse azul, las pupilas de tus ojos pueden dilatarse, tu pulso y tu respiración pueden disminuir y eventualmente.
Congelación
Muchas partes del cuerpo son propensas a la congelación, incluyendo los dedos de las manos y pies, la nariz y las orejas. La congelación se produce cuando una parte del cuerpo está helada, lo cual puede dañar los tejidos. Si no se puede recuperar el tejido, esa parte del cuerpo probablemente tenga que ser extirpada para evitar problemas de salud incluso peores. Algunas señales de advertencia de congelación incluyen: entumecimiento u hormigueo, escozor o dolor donde la exposición al frío ha sido mayor. Evita la congelación conociendo las condiciones climáticas y usando ropa de protección como guantes y gorros abrigados además de zapatos con aislamiento. Cuanto más bajas sean las temperaturas, más rápido se produce la congelación, por lo tanto, no debes permanecer en el frío más tiempo del necesario.
Otras lesiones del clima frío
Puedes padecer pie de trinchera cuando tus pies permanecen mojados y fríos durante mucho tiempo. La humedad provoca la pérdida de calor en sus pies, lo cual puede desacelerar el flujo sanguíneo y dañar los tejidos. Se puede experimentar pie de trinchera en temperaturas cálidas de hasta 15°C.
En ocasiones, el clima fresco puede dañar la piel y originar sabañones. Este problema puede causar daños como piel lacerada, hinchazón, ampollas, enrojecimiento y picazón.
Prepárate para el frío
Si debes trabajar expuesto al frío, usa siempre ropa adecuada para tal clima. Recuerda que puedes pensar que no hace tanto frío, pero tu cuerpo puede estar sometido a una presión tal que terminará tomando decisiones desacertadas o reaccionando más lentamente de lo normal. Presta atención a las señales de advertencia de la hipotermia, la congelación u otras lesiones asociadas con el frío.
