A pesar de que el síndrome premenstrual y el trastorno disfórico premenstrual tienen síntomas similares, el trastorno disfórico premenstrual causa cambios extremos en el estado de ánimo que pueden afectar la calidad de vida.

Si bien pueden confundirse, el trastorno disfórico premenstrual es una extensión grave —en ocasiones, incapacitante— del síndrome premenstrual. 

El trastorno disfórico premenstrual y el síndrome premenstrual pueden causar hinchazón, sensibilidad en los senos y cambios en los hábitos de alimentación y del sueño. Sin embargo, en el trastorno disfórico premenstrual se destaca al menos uno de los siguientes síntomas emocionales y conductuales:

  • Tristeza o desesperanza.
  • Ansiedad o tensión.
  • Mal humor extremo.
  • Irritabilidad o ira.

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La causa del trastorno disfórico premenstrual no está clara. La depresión y la ansiedad subyacentes son síntomas comunes en el síndrome premenstrual y el trastorno disfórico premenstrual, por lo que es posible que los cambios hormonales que desencadenan un período menstrual empeoren los síntomas de los trastornos del estado de ánimo.

El tratamiento del trastorno disfórico premenstrual está dirigido a prevenir o minimizar los síntomas. Éste puede incluir lo siguiente:

  1. Antidepresivos. Ciertos inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina pueden disminuir los síntomas emocionales, la fatiga, los antojos de alimentos y los problemas para dormir. 
  2. Píldoras anticonceptivas. Es posible que tomar píldoras anticonceptivas que no tengan intervalo sin píldoras —o con un intervalo sin píldoras acortado— disminuya los síntomas del síndrome premenstrual y del trastorno disfórico premenstrual.
  3. Suplementos nutricionales. Se cree que el consumo diario de 1,200 miligramos de calcio disminuye los síntomas del síndrome premenstrual y del trastorno disfórico premenstrual. La vitamina B6, el magnesio y el L-triptófano también pueden ayudar.
  4. Dieta y cambios en el estilo de vida. Hacer ejercicio regularmente disminuye los síntomas premenstruales. Reducir el consumo de cafeína, evitar el alcohol y dejar de fumar también puede aliviar los síntomas. 

Si tienes síntomas del trastorno disfórico premenstrual, consulta a un profesional de la salud para conocer opciones de análisis y tratamientos. ¡No te automediques!

 

Fuente: Mayo Clinic

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