La circuncisión masculina es una cirugía para extirpar el prepucio, la cubierta natural del pene. El prepucio brinda sensación y lubricación al pene. Una vez que se quita el prepucio, no se puede volver a colocar, así lo indica Michigan Medicine, en Estados Unidos.

Si la circuncisión se realiza, generalmente se hace poco después del nacimiento.

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Por ello, aquí te mencionamos algunos puntos clave que debes tomar en cuenta:

  1. La circuncisión es una cirugía. Causa dolor durante y después del procedimiento. Una vez que se quita el prepucio, no se puede volver a colocar. Como todas las cirugías, la circuncisión tiene riesgos. Los problemas importantes, como la cicatrización del pene, son raros. Los riesgos menores incluyen sangrado e infección.
  2. Algunos padres eligen la circuncisión por motivos religiosos o culturales.
  3. Los beneficios para la salud de la circuncisión incluyen tener menos probabilidades de contraer infecciones del tracto urinario (ITU) o infecciones de transmisión sexual (ITS).
  4. La circuncisión no solo se realiza en recién nacidos. Ten en cuenta que tu hijo puede tener sus propios sentimientos respecto a la circuncisión y podría decidir más adelante en la vida si desea un pene circuncidado.
  5. No importa si tu hijo está circuncidado o si su pene permanece natural, pues en ambos casos, es importante que lo mantenga limpio para ayudar a prevenir infecciones y otros problemas.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health