Las personas con trastorno depresivo persistente presentan síntomas de depresión que duran 2 años o más. Otros nombres que se le ha dado a esta afección incluyen distimia y trastorno distímico.
La gravedad del bajo estado de ánimo que se presenta en esta clase de depresión no es tan intensa como la de la depresión mayor o la de otros tipos, pero tiende a durar más.
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Aunque las personas con trastorno depresivo persistente pueden funcionar en su vida diaria, lo usual es que rara vez o nunca experimentan alegría.
Al igual que con la depresión mayor, el trastorno depresivo persistente puede afectar el sueño, el apetito, los niveles de energía y la autoestima.
El Instituto Nacional de la Salud Mental de Estados Unidos (NIMH) calcula que el 1.3% de los adultos de ese país experimentan un trastorno depresivo persistente en algún momento durante sus vidas. Asimismo, dicho trastorno parece ser casi el doble de común en las mujeres que en los hombres.
Fuente: Medical News Today
