El desapego emocional es la incapacidad o falta de voluntad para conectarse con la gente en un nivel emocional. Para algunas personas, estar emocionalmente desapegadas les permite protegerse del drama, la ansiedad o el estrés no deseados.
Para otras, el desapego no siempre es voluntario. Más bien, es el resultado de eventos que hacen que la persona no pueda ser abierta y honesta sobre sus emociones.
El desapego emocional puede ser útil si lo utilizas con un propósito. Puedes establecer límites con ciertas personas o grupos. Asimismo, te ayudará a mantener distancia de las personas que exigen mucha de tu atención emocional.
Sin embargo, este desapego también puede ser dañino cuando no logras controlarlo. Puedes sentirte «adormecido(a)» o «silenciado(a)». Esto se conoce como embotamiento emocional y, generalmente, funge como un síntoma o problema que debe ser abordado por un especialista en salud mental.
Conoce más: Embotamiento emocional, ¿qué es y cuáles son sus síntomas?
A continuación te mencionamos los síntomas que indican desapego emocional:
- Dificultad para crear o mantener relaciones personales.
- Falta de atención, o sentir preocupación al estar cerca de otros.
- Dificultad para ser cariñoso(a) o amable con un miembro de la familia.
- Evitar personas, actividades o lugares porque están asociados con un trauma o evento del pasado.
- Capacidad reducida para expresar emociones.
- Dificultad para empatizar con los sentimientos de otra persona.
- No compartir fácilmente emociones o sentimientos.
- Dificultad para comprometerse con otra persona o en una relación.
- No hacer de otra persona una prioridad cuando debería serlo.
Si quieres saber más sobre el desapego emocional, consulta a un profesional de la salud mental.
Fuente: Healthline