Los niños pueden enseñarte mucho sobre la vida, desde encontrar alegría en las cosas pequeñas hasta vivir el momento.

Si tienes dificultades para recordar experiencias agradables de tu infancia, participar en juegos creativos con niños puede ayudarte a reavivar tales recuerdos y volver a ponerte en contacto con el disfrute que tuviste en aquellos días.

Cualquier tipo de juego puede brindar beneficios. Los juegos como «las traes» o «las escondidas» pueden ayudar a moverte y a que te sientas libre y sin restricciones nuevamente. Los juegos de simulación o de mímica pueden ayudarte a recordar las fantasías de tu infancia y lo que significaron para ti.

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Si enfrentaste ciertas dificultades o períodos de trauma o interrupción, es posible que hayas imaginado escenarios específicos que te ayudaron a sobrellevar dichas problemáticas y a sentirte más seguro(a).

Hacer tiempo para jugar con tus hijos no solo aumenta tu sentido del juego y la expresión juvenil, sino que además genera un impacto positivo en tu propio bienestar, en parte al contribuir al desarrollo de tu yo interior.

Si no tienes hijos propios, puedes pasar tiempo con los hijos de tus amigos o familiares.

Ver películas o programas de televisión de tu infancia, o volver a leer algunos de tus libros favoritos, también puede ser una forma útil de despertar sentimientos positivos.

 

Fuente: Healthline