La pereza ocasional le da a tu mente y cuerpo un respiro del estrés de la vida. Sin embargo, si ya llevas muchos días sumido(a) en la pereza, podría ser señal de que te sientes abrumado(a), con falta de motivación o de que esperas demasiado de ti mismo(a).
Por ello, a continuación te dejamos algunos consejos que te ayudarán a superar la pereza:
1. Diviértete mientras trabajas
Puede ser particularmente difícil motivarse para realizar tareas que no disfrutas, pero que son necesarias. Escucha música o un podcast mientras realizas tareas tediosas.
Si estás empezando un programa de ejercicios, elige actividades que disfrutes o explora diferentes tipos que te parezcan interesantes. También puedes hacer ejercicio con un amigo o contratar a un entrenador personal para que te ayude a mantenerte firme y no descuides la responsabilidad que implica tu rutina.
Conoce más: Personas con déficit de atención e hiperactividad, ¿son más perezosas?
2. Crea un entorno productivo
Prepárate para el éxito eliminando las distracciones que te impiden ser productivo(a). Si trabajas mejor en un entorno tranquilo, pero no encuentras uno, prueba usando auriculares con cancelación de ruido.
Si te sientes demasiado tentado(a) a empezar a navegar por las redes sociales, pon tu teléfono en modo «no molestar» o déjalo en otra habitación.
3. Sé amable contigo mismo(a)
La forma en que te hablas importa. Si te dices constantemente que eres «perezoso», tu cerebro te convencerá de que esos pensamientos son ciertos. Reemplaza los pensamientos negativos con afirmaciones, como:
- «Lo haré paso a paso».
- «Será más fácil cuando empiece».
- «Puedo pedir ayuda».
- «No tengo que ser perfecto(a); estoy haciendo lo mejor que puedo».
Fuente: Very Well Health